El último paso

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Mario seguía pensativo cuando notó que Rosy comenzó a moverse, por lo que retiró su mano de su cabello. Pronto, Rosy abrió los ojos.

Rosy : Déjame adivinar, me volví a quedar dormida ¿no?

Mario : Sí, pero no te perdiste de nada bueno.

Rosy se incorporó y bostezó, extendiendo ambos brazos. El destello voló hasta donde estaba y comenzó a dar vueltas alrededor de ella.

Rosy : Yo también me alegro de verte.

Rosy tomó la mano de Mario y juntos salieron de la habitación a reunirse con el grupo. Una vez todos reunidos, Rosy retomó el control del observatorio y se quedó conversando con Mario. Al cabo de unos minutos se toparon con otra fortaleza, pero esta vez lucía como la nave de Dimentio y era de un color negro bastante intenso; tanto que el fondo del espacio parecía brillar a la par suya.

Luigi : ¡Di...Dimentio!

Daisy : ¡¿Cómo nos encontró?!

Geno : En realidad no lo hizo. Nuevamente, la recidencia de la estrella de oscuridad se adapta al lugar que los que la visitan temen.

Mario : Bien, terminemos con esto de una buena vez.

Mario saltó al interior de la nave y con ayuda de la estrella de luz se abrió paso a través de los corredores.

Mario : 'Puedes sentirlo'.

E. Luz : 'No, pero eso no quiere decir que no este cerca'.

Finalmente, llegaron hasta la cabina central de la nave, y al llegar, Mario se dio un gran susto. Parado frente a la ventana de la cabina y observando el espacio, una réplica suya los esperaba. La réplica se volteó y Mario pudo ver como se volvía completamente negra. Era como su sombra, pero sus ojos eran rojos. La sombra comenzó a avanzar hacia él y Mario se colocó en posición de batalla.

La sombra simplemente se dedicó a observarlo de pies a cabeza y desde todos los ángulos posibles. Al cabo de unos minutos, la sombra se paró frente a él.

Mario : Tu debes ser la estrella de oscuridad ¿no?

S. Mario : Sí, veo que eres muy observador. Te seré sincero, nunca antes alguien con 5 de las 7 estrellas había venido hasta aquí, estoy impresionado. Es más, casi diría que estoy seguro de ir contigo.

Mario : ¿De verdad? Y ¿qué hace que dudes?

E. Oscuridad : Veras, tal y como ya te lo habrá dicho mi aburrida hermana, todos tenemos un lado oscuro, un deseo egoísta.

La sombra tocó la frente de Mario, causando que este cayera al suelo. Cuando se incorporó, se dio cuenta de que estaba en el observatorio. Era obvio que la estrella estaba jugando con su mente. Mario trató de hablar con el resto de estrellas, pero ninguna de ellas respondió. Rendido, decidió dar una vuelta a ver si encontraba algo que le diera una pista; pero antes de ponerse en marcha escuchó una risa, la risa de un niño pequeño.

Decidido, siguió la risa hasta su origen y se quedó sorprendido al ver que provenía de un niño de pelo rubio que jugaba con unos destellos. El niño llevaba las mismas ropas que Mario recordaba usar cuando era un niño. Levantando la vista, se dio cuenta de que observando al niño estaban él y Rosy, pero lucían mayores y él llevaba puesta una corona.

E. Oscuridad : Vaya, vaya. El deseo de formar una familia, un clásico.

Mario : ¡Oye, no tengo tiempo para esto!

E. Oscuridad : Espera, que esto no ha hecho más que empezar.

La escena cambió y ahora Mario estaba en un cementerio. Todos sus amigos estaban vestidos de negro y tristes. Al frente del todo, Luigi y Rosy estaban llorando frente a una lápida. Mario caminó y francamente, no se sorprendió de que en la lápida estuviera su nombre. Inmediatamente, la escena cambió a una donde él le daba la mano a Dimentio.

Mario : ¿Pero qué...?

E. Oscuridad : Yo sólo saco tu lado oscuro, no soy capaz de inventar cosas. Si lo ves, es que alguna vez lo pensaste.

Mario : No.

E. Oscuridad : Vamos, no lo niegues. ¿De verdad estas dispuesto a pelear hasta la muerte para salvarlos a todos, o si la cosa se pone muy cuesta arriba hablarás con Dimentio para conseguir vivir?

Mario : No, no es cierto.

E. Oscuridad : Tienes miedo de morir, porque eso significaría perder la oportunidad de tener la vida con la que tanto sueñas. Es comprensible, has pasado tu vida salvando otras personas, yo también pensaría que merezco una recompensa.

Mario : ¡Ya basta!

Mario se sentó apoyado en una pared mientras sostenía su cabeza con sus manos, cabeza baja y los ojos cerrados. La estrella de oscuridad con la forma de su sombra comenzó a acercarse lentamente a él.

E. Oscuridad : Sabes, realmente tenía esperanza en ti. Pero bueno, creo que todos sucumben a su oscuridad interior.

La estrella iba a tomar a Mario de la cabeza para sacarlo del lugar, cuando Mario tomó su mano y levantó la cabeza. Sus ojos seguían siendo completamente negros, por lo que la estrella de oscuridad se sorprendió de la repentina acción del héroe.

Mario : Yo... yo... ¡Si estoy dispuesto a todo con tal de salvarlos!

Mario arrojó lejos a la estrella, causando que diera de lleno en el cristal de la cabina. Cuando la estrella se incorporó, observó que los ojos de Mario habían vuelto a la normalidad y que todo su cuerpo brillaba. Mario lo tomó del cuello de la camisa y lo levantó, chocándolo con el cristal.

Mario : No puedo suprimir mi miedo de morir en la batalla final, pero si puedo cambiar el motivo. Temo morir por el dolor que dejaría mi muerte, pero estoy dispuesto a ello con tal de salvarlos a todos.

La estrella comenzó a reír escandalosamente y se transformó. Ahora, tenía forma de estrella, aunque seguía conservando los ojos rojos.

E. Oscuridad : Bien hecho. Creo que al fin conocí a un digno portador.

La estrella entró al pecho de Mario. Luego de salir del lugar, se reunió con el resto y nuevamente, la morada de la estrella de oscuridad desapareció.

Geno : Bien, todos saben lo que sigue ahora ¿no?

Todos : ¡Sí!

Esta vez, Mario le prestó un poco de poder a Rosy para que abriera el portal hacia su dimensión. Una vez allí, el grupo decidió que lo mejor sería liberar a los planetas restantes para disminuir lo más posible la fuerza militar de Dimentio. Curiosamente, durante todo el proceso, no se toparon ni una vez con él. Finalmente, liberaron el Reino Champiñón. Bowser se reunió con su hijo, quien le dio las gracias a Mario y al resto por haber salvado a su padre.

El grupo comenzó los preparativos para la gran batalla. Mientras algunos cargaban el observatorio con provisiones y energía, Mario seguía entrenando sus poderes.

Geno : Bien, creo que no hay nada más que deba enseñarte. Ya no soy más tu maestro, sino tu amigo.

Mario : Lo sé.

Geno : ¿Estas listo?

Mario (Volteando a ver al cielo) : Claro que sí.

Geno : Perfecto, porque mañana se definirá el destino de todo el universo.

Super Mario: El destino del Universo (MarioxRosalina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora