Nuestra Historia [ Kaisoo ]

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Conforme pasaban los días Kyungsoo y Jongin siempre salían a dar paseos. Kai era el guía de Kyung, caminaban por lugares realmente hermosos; eran lugares que Kyungsoo sólo los había visto en película y en algunas revistas.

- Kai - llamó Kyungsoo.

- ¿Qué pasa bonito?.

- Tal vez no sea de mi incumbencia, pero ¿De dónde sacas tanto dinero?.

Jongin con una sonrisa y totalmente tranquilo dijo:

- Es un secreto... Shhhh - Mencionó con mucha gracia.

- Hey! no te vayas... no me digas que lo estás robando.

- ¡Claro que no! - dictaminó el castaño - yo no necesito hacer eso para tener dinero.

- Pero no comprendo de donde sacas tanto dinero parar salir conmigo y comprarme todo lo que quiero.

- Ya te dije que es un secreto - dictó nuevamente el castaño pero esta vez con un poco de enojo.

- Entonces es un trabajo deshonesto - esa fue la gota que hizo enfadar a Jongin.

- Muy bien aquí termina todo. Toma, para tu taxi - Kai se fue caminando y dejo sola a Kyung.

Kyungsoo se quedó parado en aquella plaza; se sentía tan enojado y a la vez asustado. No sabia en que parte de la ciudad se encontraba; cuando decía que nunca había salido se refería a que nunca había conocido las calles y lugares de la ciudad.

Desperada no hizo más que dar vueltas en aquella plaza. El miedo fue tomando el control y haciendo que Kyung imaginé cosas muy malas.

Tan metido estaba en sus pensamientos que ni se percató del chico que había frete él. No tardó tanto tiempo para chocar con el muchacho.

- Perdón... perdón... perdón - Kyungsoo no hacías más que pedir disculpas con la cabeza gacha. El temor fue aumentado aún más en la peli-rubio, que estaba a punto de entrar a una crisis nerviosa.

- Hey. Tranquilo - Mencionó el chico delante de él - no pasa nada, estoy bien.

Kyung alzó la mirada y pudo divisar a un muchacho de cabellera rubia, ojos celestes y una piel semi-blanca (parecía que estaba bronceado), además de resaltar aquella hermosa sonrisa que estaba poniendo.

- Perdón - recalcó nuevamente Kyungsoo.

- Ya te dije que estoy bien, pero parce que tu no estas bien.

Kyung no dijo nada, sólo se quedó callado.

- Creo que empezamos mal - dijo el muchacho - bien ¿cuál es tu nombre?.

El peli-rubio no dijo nada. Claro que no lo iba a decir, él era un completo extraño.

- Ok... estas perdido ¿verdad?.

- Cómo lo sabes.

- Bueno, veras tu cara esta llena de temor, igual como un niño y también estas muy desesperado. Son los típicos aspectos de alguien perdido. Te puedo ayudar ¿dónde vives?

Kyungsoo nuevamente se quedó en silencio, pero esta vez no fue porque no quería hablarle, esta vez fue porque no sabía la dirección de donde vivía.

- Creo que no quieres mi ayuda - Mencionó el rubio - Bueno, me voy - dicho eso el muchacho se giró para irse, pero una tímida y delicada voz lo detuvo.

- Por favor... ayúdame.

Sonriente el chico, se giró y cambiando su postura alegre por una sería y le hablo.