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La luz traspasaba la cortina, cosa que se hacía molesta para el peruano que aún seguía dormido, abrió los ojos lentamente, mientras parpadeaba y se dio cuenta que ya era de día, él no quería levantarse temprano así que pensaba en pasar unos minutos más en su cama, pero el teléfono empezó con el típico sonido de notificaciones.

El bicolor estuvo un buen rato ignorando su celular, pero los sonidos llegaban con más frecuencia, así que lo prendió y vio que eran.

Mensajes de México, últimamente mandaba muchos de ellos.

Holaaaa ;v

Hooolaaaaa :'v

Respondemeeee me wa a morir si no me respondeess ;-;

¡¡¡Weeee!!!

:'^

Peruuuu!!!

ya casi llego a tu casa

;v

Y como siempre, el peruano se sonrojaba y mostraba una tierna sonrisa que sólo se la dedicaba al Mexicano, Recordó que vendría por él, pero Perú recién había despertado,entonces el Tricolor vendría muy temprano.

El peruanito miró la hora.

-- ¡Por la Chucha!-- Maldijo después de ver que eran casi las once de la mañana-- Es demasiado tarde, Mí méxico ya debe estar llegando Ahh!!-- Salió de su cama como pudo, tiró el celular encima, tomó su chullo y se fue a cambiar con otra ropa.

Terminó poniéndose su poncho de colores.

Escuchó la bocina de un auto, miró por la ventana y vio que era México.

Inmediatamente corrió hasta llegar a la salida de su casa, abrió la puerta y salió para encontrarse con su amado.

-- Perú ¿Que pasó, por qué no contestaste mis mensajes? -- preguntó alzando un ceja-- pensé que te había pasado algo--

-- B-Bueno me quedé dormido y no pude responder tus mensajes -- Trató de responder con tranquilidad, pero sus nervios lo hicieron tartamudiar y dejar su mirada en el suelo--Perdón...

-- No importa wey -- Sonrió y se acercó al rostro del pequeño, Perú se sonrojó y lo miró a los ojos --

-- ¿Q-Qué pasa México? -- Alejó un poco la cara para no hacer incómodo el momento--

-- Nada -- enderezo el cuerpo y volvió al frente -- Mejor vamonos we -- caminó hasta el auto, Perú lo siguió, abrió la puerta del auto y se sentó en el lugar copiloto.

México prendió el auto y comenzó a manejar, el bicolor quería preguntar a donde irían, pero no se armaba de valor para poder entablar conversación con él, sólo se quedó callado.

--Perú ¿Tienes hambre? -- Lo miró por un momento y otra vez posó su mirada al frente.--

-- ¡No...! Estoy bien -- Habló con euforia, pero su estómago no decía lo mismo, un pequeño rugido se escuchó-- Bueno... la verdad no he desayunado --

--Estamos cerca de un parque ¿Quieres un helado? --

-- Claro pe' -- miro al Tricolor y Sonrió--

Seducción (chirú) [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora