Mientras "el señor" estaba de viaje a Draco le llegaron muchas misivas y sobres regordetes, no leyó ninguno, le temía mucho a "señor" como para violar su privacidad, con su silla de ruedas escasamente podía pasearse por la enorme mansión fue entonces cuando se le ocurrió el hacer ejercicio diariamente para poder fortalecer sus brazos y piernas, recuperando la movilidad de sus dedos, movía un poco el tobillo derecho, era poco pero era esperanzador, esperaba a diario las cartas o una visita de Molly, jamás llegó, solo se conformaba en hablar con un cuadro que se encontró por casualidad, en él observaba a un hombre de cabellera negra como el ala de un cuervo y la nariz singular, cuando el hombre del retrato supo que era Slytherin hablaron amenamente sobre trivialidades y pociones, además de hacerse compañía mutuamente, pero aquello no era mucho para Draco, quien estaba acostumbrado al bullicio de una familia numerosa.
Se paseaba por la primera planta que a pesar de ser solo la primera era amplia y espaciosa, casi no entraba a ninguna habitación, así transcurrían sus días, monótonos y aburridos, hasta que su silla chocó duramente contra una pared, en donde se abrió una especie de portal, llamado por su curiosidad ingresó, aquello parecía una sala de torturas, cadenas colgando del techo, grilletes, un estante lleno de vitales, solo eso, ni una ventana, el cuarto era siniestro, el eco era impresionante, el pobre rubio oía su respiración acelerada multiplicada por mil allí dentro, el timbre lo hizo dar un salto del susto, sorprendiese de la capacidad del miedo en la mente humana.
Despacio y con miedo, salió del lugar, la "puerta" se cerró bruscamente a sus espaldas, algo molesto y sin pensarlo mucho abrió con furia la puerta principal
- ¿Qué quiere? – habló tosco
- ¿Tú quién eres? – fue la respuesta igual de tosca - ¿y Harry?
- Está de viaje – su respuesta cortante hacia el sujeto parado delante suyo denotaba su enojo
- Dile que Fenrir quiere verlo, por cierto, mi nombre es Francis – entonces Draco le cerró la puerta en la cara, eso era todo lo que tenía que escuchar, tampoco es como si quisiera saber mucho de "señor", él deseaba explorar la casa mas no los secretos de ese hombre
Rodó sus ruedas de vuelta a la habitación, pero no consiguió abrirla nuevamente, entonces se encerró en su habitación a ejercitarse, últimamente era su único pasatiempo, quería ver el segundo piso, quería explorar a profundidad la que también era su mansión si lo pensaba bien, el timbre, el castroso timbre volvió a sonar, esta vez decidido a enviar a la luna al tal Francis abrió aún más bruscamente, muy por el contrario se encontró con un niño sonriente, era un mago explorador
- Buena tarde señor Pott--- ¿tú quién eres? – preguntó el infante a Draco
- Soy un alguien, ¿qué quieres?
- Vengo a ver al señor Potter, hace una semana que le vendo galletas, pero no pude venir antes, es que mi mami dijo que los secuestros a niños la asustaban, pero ahora todo está en calma, ella me dejó venir, el señor Harry es muy bueno conmigo y siempre me compra muchos paquetes – explicó la inocente criatura
- Pues "el señor Harry" no está – su respuesta fue simple y cortante, le cerró a puerta a ese mocoso
Hoy estaba de un humor de perros, decidió que ya no abriría la puerta a nadie más, todo buscaban a "Harry", pues "señor" debió dejar un cartel brillante con luces avisando que no estaría, se dijo y colocó música en su celular, se colocó los audífonos a todo volumen, esta vez realizó 8 repeticiones seguidas a sus ejercicios, feliz de hacer alcanzado su meta, le pareció escuchar algunos ruidos en el segundo piso pero lo ignoró, ya subiría allí alguna vez, esperaba que "señor" se tardara lo suficiente para darle tiempo a recuperarse y explorar toda la casa, como era ya costumbre en el comedor ya estaba servida su cena, así era a diario, no sabía quién lo hacía, solo la comida aparecía allí, comió con ganas, se dispuso a leer "the King le rat", para cuando "Peter Marlowe pudo conocer al Rey" el ruido en el segundo piso era imposible de ignorar, además que el silencio luego de ello era espeluznante, tomó el cuadro de Severus entre sus brazos y lo despertó
- ¿Q-qué sucede Draco?
- Arriba hay mucho ruido, esto comienza a asustarme
- Ni se te ocurra tratar de subir solo cierra bien tu puerta y duerme, veo ya tus ojos cansados
- Severus si sabes algo debes decírmelo
- No sé nada Draco, desde que tengo memoria como retrato, siempre estuve en ese armario de escobas, tú me salvaste de allí
- Tienes razón, mejor aseguro mi puerta y duermo – el rubio se acomodó en su mullida cama luego de asegurar todo con hechizos, acurrucado con el cuadro del pelinegro contra su pecho dormía plácidamente, si hubiera sido más audaz habría notado el carrito lleno de galletas abandonado y solitario en la puerta principal, o por lo menos se habría dado cuenta que en el suelo del recibidor algunos mechones del castaño cabello de Francis estaban regados.
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Días sombríos (HARCO) EN HIATUS
ФанфикDraco creció en casa de los Weasley, cuando su padre... Harry Potter lo había dejado, nunca se volvieron a ver, hasta que el rubio sufrió un accidente de quidditch que lo dejaría en una silla de ruedas. NO COPIAS NO ADAPTACIONES NO GUIÑOS NI SIQUI...