"PECADOS"

2

Mire al chico antes de que entraramos a mi casa, suspiro un poco tomando la perilla.

-No tengo mucho, y es un desastre perdón por eso.
-Tranquilo, por algo empezamos.

Mire que sonrió tranquilo, por lo que me hizo entrar en confianza para abrir la puerta dejando pasar al chico, entré detrás de él cerrando la puerta caminando hasta un sofá cama que es donde duermo.

-No es malo dónde vives, es relajante igual tienes orden.
-Yo dormiré en el piso, quiero que duermas en mi cama.
-¿Bromeas? Yo soy el invitado.
-Pero no sería bueno que te lastimaras la espalda ¿Verdad?.
-¿Qué tal si dormimos juntos? No le veo problema a eso, ¿O sí?
-Claro que no, de acuerdo dormiremos juntos.

Suspiré, sacando un par de almohadas y dos mantas, mire al chico por un momento seguido de tomar asiento en la cama.

-Gracias, agradezco lo que has echo por mí.
-No tienes que agradecer, ya te traeré algo de ropa para que descanses mejor.
-Gracias.

Me levanté para ir en busca de algo cómodo para él, suspiré al encontrar algo bueno y solamente tome algo con lo que estuviese cómodo.

-Oye, no encontré alguna pijama ya que no uso pero encontré esto...

Mire al chico que ya dormida, suspiré de vuelta seguido de acercarme a él para acomodar su almohada al igual una sábana, me levanté y volví a la pequeña cocina para prepararme un café mientras miraba al adverso, sonreí un poco, tal vez ahora haga una buena amistad, o solamente es amable por darle techo al menos una noche no tenía idea, pero era agradable saber qué tengo a alguien ahora para hacerme algo de compañía.
Caminé a la ventana, recargandome un poco y mientras bebía aquel café disfrutaba de la vista, después deje aquella tasa y mire la puerta, mire al chico no sin antes dejar un pequeña nota por si despertaba. Salí caminando un poco más, nunca me cansaba de salir menos por las noches y no sentirme peor, caminaba sin algún rumbo hasta quedar en aquel parque en donde me había encontrado al chico, me acerque a la banca y tome asiento hasta sentir vibrar mi celular lo saqué un poco extrañado pues nadie me llamaba, mire quién era y sonreí contestando inmediatamente.

-¿Si?
–Hola Nam, solamente quería decirte que iré a tu casa hace tanto no te veo, necesito contarte tanto.
-Yo también necesito hablar contigo hobi.
–Ah, ya te he dicho que no me agrada que me llames así.
-Lo siento, lo olvido.
–Mañana espero verte a la central de autobuses a las diez de la mañana, no llegues tarde ¿De acuerdo?
-Claro que no, oye todo bien en tu casa?
–Creeme que para mí nada está bien, soy un estorbo aquí no planeo seguir.
-Te entiendo muy bien.
–Con la diferencia que no estás enfermo, perdón si te llegó a asustar.
-Sabes que no me asustarías, sé lo que te pasa.
–Entonces, no vemos mañana..te quiero.
-Al igual yo.

Terminé la llamada y me levanté para seguir caminando un poco más mientras miraba mis pies y cómo mi sombra crecía para volver a desaparecer, suspiré pues es cómo era mi estado de ánimo, en momentos me sentía tan grande alguien que puede con todo, pero también me siento un total imbécil por lo que llegue a cometer pero no sirve de nada comenzar a lamentarme, eso no cambiará el echo de lo idiota que soy, pero tampoco hago nada para cambiarlo no debería quejarme si yo mismo me busco mis problemas.
Comenzaba a sentir sueño, además me preocupada Taehyung por si alguien entraba a casa le hiciera algo, más daño no quisiera causar, así que me di la media vuelta para caminar de nuevo a casa con algo de prisa manteniendo mi vista al frente, hasta sentir que chocaban contra mi hombro, voltee a ver quién había sido, suspiré pues el chico no pediría perdón lo supuse porqué igual tenía la mirada baja y se tambaleaba un poco, después volví a mi camino, apurandome un poco más.
Al llegar a casa, cerré la puerta con cuidado mirando que el chico aún dormía, me acerque a la nota seguido de tirarla y entre al baño para ducharme, quite mi ropa y deje que el agua saliera estando tibia entre soltado un suspiro relajándome por el agua.

Al salir me vestí y caminé a la cama para acostarme solamente cerrar mis ojos quedando totalmente dormido.

“Teniendo la mirada perdida sin tener equilibrio, así voy a caer.”