Algo fundamental para que ésto funcione, es dejar las cosas claras desde el principio.
[...]
La música estaba a tope, la bebida ya escaseaba, cuerpos sudado en los sillones, algunos haciendo expectaculos, otros simplemente bailando. La mejor fiesta a la que jamás se haya ido, eso era. Se sentía mareado, algo desubicado, pero seguía consciente de todo lo que pasaba... O al menos eso creía, hasta que llegó a la pista de baile. Estaba eufórico, así que cuando la canción cambió a una más sensual, no dudó en moverse al ritmo de la música, sintiendo como alguien se pegaba a él, uniendo sus caderas y moviendolas al compás.
No podía ver su cara, pero podía asegurar que era la chica con el mejor cuerpo que había visto. Sus piernas largas, grandes glúteos y diminuta cintura, sólo que había algo que no cuadraba... Sus hombros eran demasiado anchos para ser una chica, pero no le importó, por que el movimiento lo estaba volviendo loco, así que sin dudar rodeó sus brazos al rededor de su cintura, y comenzó a morder el lóbulo de su oreja, escuchando claramente como jadeaba de sorpresa y deseo.
Perfecto, ya tenía su polvo de ésta noche. Posó las manos en las caderas de la persona, y comenzó a guiar los movimientos, acercando más el cuerpo hasta que no hubo nada de espacio entre ellos. Comenzó a besar su cuello húmedamente, sintiendo a la persona tensarse por su toqué, pero no lo apartaba. Sintió como las frías y largas manos de aquella figura tomaban las suyas, paseando las por todo su cuerpo, sintiendo como los latidos de él, o ella, se hacían más erráticos.
No tuvo tiempo para digerir lo que estaba pasando cuando la o el desconocido se volteó completamente, y sin darle tiempo de objetar nada, tomó sus labios en un salvaje beso. Ambos labios se movían ansiosos, probando los del otro. El pelo negro se dio cuenta de que sólo era unos pocos centímetros más baja que él, así que sin dificultad la tomó de la cintura, acariciando lentamente, disfrutando de su cuerpo. Bajó lentamente las manos hasta que llegaron a sus glúteos, oyendo el pequeño y casi imperceptible gemido que soltó el desconocido. Y Dios... Fue lo mejor que ha escuchado en toda su jodida vida. Se separó del beso, y tomó ansioso la mano de la persona, abriéndose paso entre la gente que estaba en la pista improvisada, llegando rápidamente a las escaleras, subiendo como alma que lleva al diablo, escuchando la risotada de la otra persona.
Se oía distorsionada, y todo estaba comenzando a dar vueltas, pero no importaba, pues estaba feliz. Sea quien sea esa persona sabía lo que quería, y quería follarla hasta quedarse seco. Entraron en el primer cuarto desocupado que encontraron, no terminando de cerrar la puerta cuando sus bocas se volvieron a encontrar en otro sensual, salvaje y casi desesperado beso.
Ambos comenzaron a pasar las manos por el cuerpo del contrario, apretandose y explorando lo que quedaba al alcance enstando estancados contra la puerta. Sintió como su ropa era despojada habilmente, mientras él sonreía al cielo, agradeciendo a toda la Corte Celestial el regalo que ésta persona fuera. Sintió la suavidad de las sábanas en su espalda, y cómo su torso recibía con gusto cada beso y mordida de la otra boca. Abrió sus ojos lo más que pudo, logrando captar una cabellera rosa y un arete de una flor. Definitivamente era chica.
Sintió como sus pantalones fueron arrancados con ansiosa pasión, y después, el frío viento de la madrugada golpeando su ereccion lo hizo jadear. La humedad de la boca del contrario lo estaba volviendo loco, perdiendo un poco más la cabeza. Estaba seguro de no haber consumido ninguna droga, pero se sentía tan ligero y feliz que dudaba mucho que el alcohol tuviera ese efecto en él, mucho más después de que su cuerpo estuviera más que acostumbrado al alcohol. Se sentía mareado y desorientado, pero estaba consciente de lo que sucedía en ese cuarto. Tomó con fuerza moderada la cabellera rosa y hundió aún más su polla en la caliente humedad de la garganta contraria.
ESTÁS LEYENDO
10 reglas para tener un "Amigo con Derechos" [KookV]
FanfictionSi tu buscas un amigo con derechos, o follamigo, como quieras decirle... Está pequeña guía de reglas te ayudará a que no cometas el peor error de tu vida. Si no sabes cómo llevarte sin tener que relacionarte sentimentalmente con la persona, ésto te...