quiet melodies

Capítulo Único

bueno, este es un fic que escribí en inglés por el cumpleaños de estos dos chavales allá por febrero en Archive Of Our Own y que me dio por traducir porque sí. mi mayor arrepentimiento es no haber incluido Repaint en esto porque habría encajado perfectamente

y bueno, no sé, seguidme en tumblr en yume-fanfare (es la mejor url y es mía)

ah, y esto tiene unas 6000 palabras, así que coged palomitas o algo

ya haré portada mañana si eso porque es la una de la mañana

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Aizou tiene seis años la primera vez que oye hablar de las almas gemelas, pero llevaba escuchando eso desde hace mucho antes.

A Aizou le han dicho que cuando tu alma gemela está cantando, los oyes en tu cabeza.

El alma gemela de Aizou es buen cantante, y le gusta escucharle cantar —el sonido de su voz siempre lo hace más feliz, lo tranquiliza. Escucharle siempre es la alegría de su día y Aizou a menudo canta también —quiere darle las gracias por dejarle escuchar, y es probablemente gracias a su alma gemela que se enamora de la música.

Tiene siete años la primera vez que le dicen cállate, haces mucho ruido, nadie quiere oírte cantar.

Aizou tiene ocho años la primera vez que va a una clase de baile.

Sospecha que es la manera que tienen sus padres de librarse de él el máximo tiempo posible, pero está emocionado igualmente.

Y resulta que se le da bien —se le da bien saltar, dar vueltas, bailar, y está orgulloso de ello.

Siempre se le habían dado bien los deportes, pero esto es diferente. Se siente diferente. Aizou está más feliz cuando baila que cuando gana un partido de fútbol.

A veces la voz en su cabeza canta una melodía diferente de la que suena por los altavoces y es difícil coordinarse, pero a Aizou le gusta tanto escuchar esa voz —ahora ya no cantan tan a menudo— que no le molesta en absoluto.

Él a penas canta mucho ya, pero volverá a hacerlo, eventualmente.

Aizou deja las clases cuándo cumple once años, a pesar de ser el mejor bailarín.

Aizou tiene doce años cuando consigue su primera guitarra.

Le dan algo de dinero por su cumpleaños y le dicen que haga lo que quiera con él, así que se compra una guitarra y aprende él solo a tocarla.

Es cuidadoso con ella —no toca muy alto y sabe cuándo es mejor estar en silencio— pero eso no quiere decir que no la disfrute. La guitarra se vuelve una nueva manera de escapar la realidad, le la misma manera que el baile cuando Aizou era más pequeño.

Y a veces —a veces Aizou canta también. Y ocasionalmente su alma gemela canta con él.

Aizou está seguro de que es un chico, probablemente de su misma edad. Sigue siendo un cantante excepcional. Aizou ha acabado teniendo su mismo gusto musical —o quizás fue al revés— y ha aprendido a tocar muchas de las canciones que canta su alma gemela.

Si tan solo pudiera escucharle tocarlas.

Aizou tiene quince años cuando decide seguir sus sueños.

Encuentra el anuncio por casualidad: un debut en solo para el Grand Prix.

No se pierde nada por intentarlo, ¿no?

Así que practica.

Descubre que sigue siendo buen bailarín —se ha esforzado en no perder flexibilidad— e incluso si su voz no es tan buena, él espera que sea suficiente.