Das saltitos de felicidad y casi gritas de la emoción. Querías ver uno hacía años. Aunque no es lo que esperabas, y quisieras ver en detalle un modelo real, estás más que satisfecho. Alzas los cuernos y soplas el pelo frente a tu hocico. La escultura humana tiene un objeto en lo que piensas que es la mano izquierda. Cuando revisas en tu folleto, descubres que se llama "rosa". Feliz de aprender algo nuevo, decides investigar más sobre el tema y sales alegremente de la habitación mientras tus pezuñas resuenan sobre los mosaicos del Museo fantástico. Sin duda, volverás.
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Un museo fantástico
FantasyEl Museo abre sus puertas nuevamente, ¡todos están invitados a pisar nuestras instalaciones con todos los pies, pezuñas, patas o garras que tengan! Muchas gracias y bienvenidos a la tierra de la fantasía y magia, bienvenidos a un nuevo concurso de @...
