Carta Anónima

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19.02.2006,Carta anónima a Eren Jaeger.



Tenía un aroma a vainilla, era muy peculiar que un chico oliera así, pero Eren Jaeger ciertamente no era lo normal.

Todo en Eren Jaeger era peculiar, desde el lío enredado en su cabello hasta la punta de su pie.A Eren Jaeger tampoco le gustaba comer tomates, aún podía engañarlo con salsa de tomate, pero nunca se comió el tomate en sí, ni siquiera comió las aceitunas, pero en compensación, a Eren Jaeger le encantaba comer jiló. Mientras muchos harían muecas, él lo comería con una sonrisa.

Su ropa tampoco tenía mucho sentido, pero con la estructura del cuerpo que tenía, todo le quedaba bien.

Tenía un gusto musical muy extraño, generalmente a Eren Jaeger le gustaban las canciones menos populares, le gustaba descargar toda una discografía y seleccionar las más peculiares, porque después de todo, si era peculiar, ¿por qué sus canciones no lo serían?Eren Jaeger también tenía un grupo de amigos peculiares, cada uno con su extrañeza o rareza, pero cuando estaban juntos todo ese lío de ideas tenía sentido. Su sonrisa cuando está con sus amigos se vuelve tan brillante que podría envidiar al sol, y tal vez a veces lo refleja, porque el adolescente Eren Jaeger usó un aparato dental.

Pero más allá de lo peculiar, Eren Jaeger era una persona muy terca y obstinada.Eren Jaeger era el tipo de chico que con una mirada tenía el poder de balancear sus estructuras, esos ojos turquesas llevaban olas que te atraían y te arrastraban si las dejabas. Y como si eso fuera una oración, esa mirada me atrajo y me llevó tan lejos que cuando me di cuenta de dónde estaba, ya no sabía cómo regresar.

Todo en él lo atraería cuando pensabas en ir, e incluso si no quería hacerlo, solo tenías que mirarlo una vez más y su mundo se estaba derrumbando.

Att. Anónimo

VanillaWhere stories live. Discover now