Pacto Infernal.

1. Manzana de oro.

La manzana de la discordia es para Eris, como para Pandora es su caja. Sin ella no hay razón para existir, puesto que de allí,  es donde Eris saca su poder.

El fruto fue fundido por las almas malditas de Tártaro. Es el mayor tesoro que el mal pueda poseer, y no es por estar cubierta del oro más puro, es porque en su interior contiene lágrimas de Hades.

Hubo un tiempo en donde la oscuridad y la maldad reinaban por sobre todas las cosas, el mundo estaba sumido en un caos total. Pero un día alguien decidió decir alto, no quería seguir viviendo en un mundo lleno de miseria y maldad. Theodore Brown,  padre de Nícholas, fundó "Los guardianes de la luz", una organización que combatiría todo tipo de mal existente en la tierra, desde caidos hasta hechiceros.

Era una noche de frío invierno cuando idearon el plan para robar la manzana de Eris. Sería en el décimo quinto baile anual de invierno. Theodore colocó una droga en la copa de Eris, para así lograr dormirla. Cuando cumplieron su cometido, su misión sería buscar la manzana, por lo que los guardianes se dividieron para poder registrar todos los lugares posibles.

El primer lugar que registraron fue su hogar. Nada. Buscaban con todas sus fuerzas, pero poco a poco se iba extinguiendo su esperanza, ya todos resignados por el poco tiempo que les quedaba decidieron parar.

Theodore estaba frustrado por su situación, trato de pensar en cualquier lugar, tenia que ser un lugar que nadie sospechara, público pero con escondites. Hasta que lo consiguió. El templo.

Efectivamente la manzana se encontraba en el templo. Los guardianes entraron por un pasadizo que los llevaría directamente al corazón del edificio, pero al llegar a la cúpula notaron que había una inscripción en griego.

" Μόνο μια καθαρή καρδιά μπορεί να κατανοήσει το μυστήριο του στίχου"

Todos se encontraban anonadados, no sabían que pensar o esperar. Ninguno de ellos hablaba o sabía leer griego, por lo que su misión se estaba complicando más de lo que ellos esperaban.

Theodore estaba cansado, se sentía decepcionado por no lograr su cometido, los guardianes decidieron abortar la misión y planear una estrategia para descifrar el mensaje.

Al salir del recinto, no notaron la furia que se estaba desatando contra el pueblo. Sólo fue hasta que Eridé, con gran velocidad agarró a Theodore por el cuello y lo miró. Él, impactado por la situación toma rápidamente una daga, símbolo de amenaza contra la diosa.

Eridé entra en cólera, y le grita a Theodore que le devuelva lo que le pertenece. Y ahí es donde él se da cuenta de todo. Alguien ya había robado la manzana, esa inscripción en griego era un mensaje para los guardianes.

- ¿De que me hablas mujer? - pregunta Theodore haciéndose el inocente.

- No te hagas el desentendido mi querido Guardián - habla Eridé, supo que lo había descubierto, puesto que al nombrar la palabra "guardián" Theodore se tensó y miró a la diosa con rabia.

- Tu no sabes nada - le dice Theodore, está nervioso, toda su misión estaba en riesgo. Su familia podía estar en peligro.

- No me subestimes querido. Quiero que me acompañes a un lugar más privado.