1. Querido Sabado

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1 año atras...

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Estaba acostada en mi cuarto escuchando música a todo volumen, claro con audífonos sino mi madre es capaz de quitarme mi celular cuando pongo música muy alta,..... Pero bueno.

Me encontraba mirando el techo de mi cuarto, creo que necesita un poco de color y no se talvez unas estrellas que brillen en la noche...

-Mía , mamá te está llamando hace mucho rato- dijo mi hermana la más pequeña, tiene 12 años pero por su estatura diría yo que tiene 10, tiene cabello rubio un poco oscuro nomas, ojos verdes miel, y una actitud muy cálida.

- Dile que ahora bajo.- le contesté con todo el desánimo del mundo.

- Pero muévete que se va a enojar -replico ella.

- ¿Dime alguna vez que no se haya enojado conmigo sin motivo?- le dije pero era verdad desde que entre a la escuela hemos tenido pelea tras pelea.

- solo muévete, quieres.

-aghhhh yo bajo cuando quiero ¿ok?- salió suspirando, no un suspiro de pena, sino de pesadez.

- ¡¡Mia, baja ahora mismo!!- grito mi madre desde la cocina, siempre me gritaba.

Aghhh que horror.

- Si ya voy!! - apague la música y deje mi celular con los audífonos tirados en la cama y baje corriendo las escaleras, la cocina se encontraba abajo a lado del comedor, es amplia mi casa en especial la cocina y la sala.

- Te he dicho un millón de veces que no bajes corriendo las escaleras, un día de estos te caerás y no estaré para ayudarte.- me dijo mi madre, es muy joven como para tener 4 hijos y uno de 18, es un poco más alta que yo, tiene cabello castaño claro ondulado, ojos color miel, tez clara y un escultural cuerpo.

-¿Para qué me llamaba, en que le ayudo?-respondí se notaba que yo estaba fastidiada y mi mamá lo noto enseguida. Era de haberme callado y esperar que me ordene, pero qué más da, igual ya estoy aquí.

-Cuidadito ese tono de voz conmigo, jovencita; ¿qué estás haciendo?

- Nada, ¿por?

- Necesito que me ayudes hacer la comida..., ¿será que la señorita puede hacer eso? Oh está muy cansada- odio cuando sale con su sarcasmo.

- No, ¿qué hago?- le respondí con una falsa sonrisa, parece que la creyó por qué cambio su semblante, además necesitaba estar bien con ella para que me dé permiso el sábado para una fiesta en casa de Helen, ella es una amiga de la escuela que siempre organiza muy buenas fiestas en su casa y esta vez iba a ir Alex, mi mejor amigo, ese hombre conoce toda mi vida hasta lo último de mí y yo conozco todo de él, hasta con quien se acostado, lo se repugnante pero él me da esa confianza.

- Hija este fin de semana me toca trabajar todo el día así que por favor no quiero peleas como la otra vez, ¿entendido?-  Si!! mi mamá no estará así que podre  llegar más tarde incluso dormir a fuera, gracias al cielo.

- Claro mamá sabes que yo no empiezo la pelea siempre es mi hermano- Kevin es mi hermano mayor y único hijo hombre, tienes 18 años y siempre se agarra a pelear conmigo, sacarme cosas en cara y hasta avisarle a mi mamá cuando llego tarde (cosa que es muy a menudo) pero igual parece un crio pequeño, aunque con todos esos defectos es un gran hermano y muchas veces me ayudado a pedir permiso y en mis tareas. Algo así como una relación amor-odio.

-Pero tú que le sigues, son hermanos y quiero que comiencen a llevaros bien como cuando eran crios, vosotros siempre estaban juntos a pesar de todo- ella siempre me dice eso hasta ya me lo sé de memoria siempre sale con ese cuento y yo solo escucho, quiere que nos llevemos bien y que no seamos como sus hermanos, es decir, mis tíos, tengo 4 tíos y ellos siempre pasan discutiendo en las cenas y reuniones familiares por parte de mi madre y pues por parte de mi padre ni si quiera me llevo con mis tíos y muy rara vez los veo.

My lies, Your secretsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora