I never forget you - Luck

"Confío en ti"

- Ayúdenme!!!!! Ayuda!!!

Gritaba con todas sus fuerzas, desesperado. Intentaba poder ayudarlo, pero parecía imposible.

Estaban solos. Y los más probable era que ambos mueran.

Como si la vida les hubiese dado la espalda, tendrían que aceptar lo que venía.

- Hyuk, te amo...

Vio su rostro por última vez y después vio como el fuego empezó a cubrir todo.

- Hyuk, estas bien? – me acerque a él al verlo respirar agitado – tuviste una pesadilla?

El asintió y se sentó en la cama.

- ¿Quieres que te traiga algo de beber? – me negó con la mirada baja. – Hyuk, es por la película? – lentamente levanto la vista para que ambos nos miremos a los ojos en esa oscura noche. – Lamento...no poder comprender lo que te sucede. Quisiera que puedas confiar más en mí. Llevas tiempo viviendo conmigo, pero no voy a obligarte a que me des tu confianza. Sin embargo, estaré preparado para cuando quieras dármela – me acerque a él y sin pensarlo bese su mejilla – descansa...

Me pare y me fui a la cocina para hacer las cuentas de los servicios que debía pagar.

No sabía en qué momento me había quedado dormido, pero empecé a sentir una cálida mano acariciar mi espalda. Se sentía bien, me tranquilizaba, me sacaba una sonrisa tonta.

Abrí mis ojos y lo primero que vi fue su serena sonrisa, esa que tanto me gustaba ver. Subí un poco más y vi sus pequeños ojos mirarme con calidez.

Era Hyuk, ese niño de 19 años que había entrado a mi vida sin ninguna invitación. Ese niño que aún no me dice nada de su vida, pero al mismo tiempo pareciese que me está diciendo todo, solo soy yo el único idiota que no logro comprenderlo.

Lentamente me fui sentando y miré su rostro. El no dejaba de sonreírme pacíficamente. Y de repente tomo mi mano y le empezó a dar pequeñas caricias.

Mi corazón estaba latiendo frenéticamente, no podía ignorar estos sentimientos que tengo por él. Tomé la mano que me acariciaba y le di un pequeño beso.

- Bueno días...

Su respuesta fue una sonrisa y una caricia en mi rostro con su otra mano libre.

- ¿Dormiste... bien?

Asintió sin quitar la vista de mis ojos.

- ¿Quieres desayunar algo en especial? Puedo preparar lo que se te antojé – le sonreí

No entendí en que momento, en qué segundo de este día él se había atrevido a juntar nuestros labios.

En ese pequeño momento sentí una hermosa sensación dentro mío, me sentí vivo, esa sensación era nueva para mí, era una sensación gustosa.

Nuestros labios se separaron, tome su rostro con mis manos y compartimos miradas.

- Dime que no es un sueño...

El rio un poco y negó.

- SangHyuk... no te quiero perder de mi vida...

Permanecimos unos minutos así. Después empecé a preparar el desayuno junto a el.

"Taekwoon, lamento haberte hecho sentir mal ayer"

- eh? ¿De que hablas?

" No quería que sientas que no confío en ti. Yo confío en ti, pero es algo que me lastima cada vez que pienso en eso...o trato de hablar del tema"

- No pidas perdón. Seguro es algo muy delicado. Puedo entenderlo Hyuk – le sonrío para que vea que todo esta bien

"Juro contártelo con mi propia boca y no a través de un estúpido papel"

- No digas eso. Esos estúpidos papeles nos han ayudado a comunicarnos – rio un poco – No hay nada como lo nuestro. Y eso lo hace mas especial.

"Supongo que por eso somos una pareja única"

Mis mejillas empezaron a arder como nunca y al parecer ese pequeño niño lo había notado y por eso reía de esa manera tan tímida y traviesa.

Éramos pareja, sin saber desde cuándo o como. Simplemente éramos una pareja. Una pareja que se amaba demasiado.

¿Eso era bueno? ¿No íbamos muy rápido?

Algo dentro mío decía que esto no duraría. ¿Por qué? ¿Acaso lo que Hyuk me diría cambiaria mi forma de ver las cosas?

Estaba dudoso, cuando en verdad debería estar feliz porque él tiene mis mismos sentimientos.

Mis dudas y mis miedos se irían cuando él me contase que es lo que paso...

Ahora era yo el que no podía confiar.