¿Cansado o cansada de leer siempre lo mismo?
¿Buscas algo diferente y fuera de lo común?
¿Quieres leer algo pensado por ti y creado por mi?
Déjame decirte que estas en el lugar indicado.
Aquí podrás hacer tu pedido, ya sea:
▶ Fantasía.
▶ Policial.
...
— Un café salió de la cárcel y se volvió expreso. ¿Entienden? Ex-preso JAJAJA.
— Tarde media hora en escribir ese chiste, no podía parar de reírme.
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Cuarto pedido:
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¡Comencemos!
Tres años sin ella.
¿Tanto tiempo había pasado ya?
Seokjin años atrás había conocido a una loca, amorosa y graciosa extranjera en un parque para niños.
Curiosamente ese día la encontró en los columpios llorando porque unas chicas coreanas de su Universidad le habían dicho cosas completamente desagradables y fuera de lugar, solo por el simple hecho de ser una estudiante de otro país.
¿Era su culpa haber recibido una beca?
No, no lo era.
Él se había acercado a ella con el fin de hacerla sentir mejor, pero no contaba con que terminaría flechazo con sus encantos.
Al principio todo fue de color rosa.
La invitaba a citas, veían películas acurrucados en la cama cada fin de semana, cocinaban juntos y se vestian con ropa de parejas casi siempre.
Él solía escribirle cartas, enviarle rosas y tirarle piropos.
Su amor era la la antigua.
O lo era todo o no era nada.
La amaba demasiado como para dejarla ir por alguna tontería, en cada momento se aseguraba de que estuviera cómoda y se sintiera bien, al igual que ella lo hacía con el.
Su amor era recíproco.
Se complementaban a la perfección, era como si hubiera encontrado su pieza faltante.
Antes de conocerla, se sentía sin vida, sin ninguna razón por la cual levantarse cada día y seguir pero todo eso cambio cuando el destino la puso en su camino.
