Hoy desperté y mire hacia atrás, hacia el pasado.
Me sorprendí al recordar que hace un año exactamente estaba terminando una relación, lloraba todas las noches sin parar, me sentía culpable, lo único en lo que pensaba era qué había hecho mal, qué había dicho mal, no tenía respuestas y eso me hundía mucho más.
Creía que si fuese otra chica, tal vez el no se hubiese ido, me sentía poca cosa, que no valía como mujer.
La mayoría de las personas me juraban que esto se me iba a pasar tarde o temprano, que ya después de un tiempo iba a dejar de doler. "Ellos no me entienden y no saben lo que dicen ¿Qué ellos no sabe lo que duele un corazón roto?" pensaba.
Y es que en verdad en ese momento yo no veía otra cosa que no fuera el dolor, y creía que nunca lo iba a superar. Que ironía, porque hoy, un año después, aquí estoy, disfrutando de la vida, luchando por mis sueños, queriéndome cada día más, viendo la vida de otra forma, feliz, enfocada en mí, conociendo nuevas personas.
Y sí, a él lo quise y aún lo quiero, aunque quiero mucho más a esta persona que me he convertido gracias a aquello que me pasó.
