De repente, sentí un impulso en mi cabeza, pero seguía viva, seguía de pie, simplemente sonó un disparo fuerte y yo seguía en pie, inexplicablemente…
-Una pistola de fogueo? –grita Alex arrebatándole el arma inmediatamente y tirando al atracador al suelo, fuera, la policía al escuchar el disparo ha entrado corriendo dentro del banco, para ver qué es lo que ocurría, cuando, de repente…
Pum! Pum! –Se escuchan dos disparos mucho más fuertes que el anterior, y se escucha el sonido de las balas caer en el suelo tras impactar con el techo, todos se giran a observan de donde proviene el disparo, y ven a un atracador con un rehén que ha disparado al techo
-Que nadie se mueva, o me la cargo, y esta sí que es de verdad…
-Vale, vale, calma… -dice el comisario
Alex recoge a Iraia y se vuelven a sentar al suelo, y empiezan a discutir que porqué se ha levantado y ha arriesgado su vida de esa manera
-No lo entiendes? Ahora podrías estar muerta! –le dice Alex bajito sin que reciba respuesta de Iraia
-Gilipollas, porqué has disparado? –le grita el que parece ser el jefe a uno de los ladrones, que se acerca ya levantado del suelo despreciando a Alex y diciéndole a su compañero que se ha puesto nervioso y ha apretado el gatillo sin querer- Ahora solo nos valemos de esta arma…
-Jefe, que vamos a hacer?
-Retirad a toda esta gente de aquí, despejad la zona! Dónde están los francotiradores, están ya en su posición? Pueden hacer algo? –dice el comisario por Walkie a uno de sus compañeros
-No tienen visión, siguen buscando algún posible ángulo de tiro señor
-Que cojones podemos hacer…
-Psss… hey… -le dice Alex a Iraia, que cansada de él acaba respondiéndole
-Cállate, me voy a sacrificar por todos
-Pero que dices? No hagas ninguna tontería más y estate quietecita…
Iraia empieza a levantarse de nuevo, pero es retenida por Alex y empiezan a moverse bruscamente
-Eh, que pasa con vosotros?? –dice uno de los ladrones
-Déjame, qué te importa a ti? Suéltame… -dice Iraia intentando desprenderse de Alex, que ya se han apartado un poco del grupo de rehenes que están en el suelo
-Que pares te digo, para ya… -insiste Alex agarrándola con todas sus fuerzas, pero en un descuido, Iraia se suelta de él, y cuando va a alzar la mirada se encuentra delante de sus ojos al ladrón apuntándole con la pistola verdadera
-Oh! Sorpresa, ahora eres tú mi rehén –dice el Ladrón apuntándola firmemente
-Idiota…! –se indigna Alex en el suelo
-Oh, sorpresa… -dice Iraia
-Qué? –se sorprende el Ladrón
-Vamos, dispara… -dice Iraia, sorprendiendo a todos los que están en el banco, incluso a los mismos ladrones que no saben cómo actuar ante semejante situación de locura de la chica
-Está loca… -murmuran todos
-Te crees que no soy capaz? Pero si lo hago los polis esta vez sí que entrarán a saco y se habrá acabado todo para nosotros… -dice apoyando la punta de la pistola en la frente de Iraia
-PARAAAAAAAAAA!!!! –dice Alex levantándose y interponiéndose entre el arma y Iraia, ante de nuevo, el asombro de todo el mundo
-Qué ocurre? Se ha escuchado un grito… -se preocupa la policía afuera…
