»Abraceme Hyung! ;; Yoonmin fluff [Pausada]

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Era su cumpleaños número doce, ¡número doce!. Para el era un gran número ya que siempre creyó que ese número se escuchaba muy grande.
Se levantó con entusiasmo de la cama y bajo rápidamente las escaleras para encontrarse con el pequeño JiMin de siete años desayunando en la mesa del comedor de su casa y frunció el ceño, JiMin no había venido días festivos como Navidad, cumpleaños y esa clases de cosas. Antes de que pudiera decir algo el pequeño castaño se acercó a él y lo abrazó por las piernas.

-¡Feliz cumpleaños hyung!- YoonGi no pudo evitar sonreír y revolvió los cabellos del menor.

-Gracias JiMinie, ahora ve a terminar de desayunar.- JiMin se sentó nuevamente en la mesa para seguir comiendo.

El pelinegro de ahora doce años buscó a su madre por toda la planta baja encontrándosela en el jardín sentada en un pequeño banquito de madera.

-Que hace él aquí- dijo apoyándose en el marco de la puerta trasera de su casa. Su madre se dio la vuelta poniéndose de pie.

-Su madre no podía cuidarlo hoy, ya sabes- se acercó a su hijo y lo abrazó.
-Feliz cumpleaños, hijo- finalmente entró a la casa dejando a su hijo solo.

No le molestaba la presencia del pequeño, de hecho le gustaba pero tenía miedo que los chicos de su edad se burlasen de JiMin.
Sintió un jalón en su ropa y se dio la vuelta.

-¿A hyung no le gusta que venga?- abulto su labio inferior haciendo un pequeño puchero con lo que el pelinegro no pudo luchar. Levantó al pequeño en su brazos y lo abrazó.

-No JiMin, no es eso. Sabes que hoy vienen mis amigos- el pequeño asintió -Bueno, si alguno de ellos es malo debes decírmelo inmediatamente ¿Entiendes?.- JiMin asintió efusivamente.

La madre de YoonGi no se molesto en cocinar si no que solo contrato algunos servicios para que atendieran a los invitados de su hijo, ella estaba demaciado ocupada para gastar su valioso tiempo en cocinar cosas para críos que nunca había visto.

Los primeros en llegar fueron Hoseok, Namjoon y SeokJin, eran sus mejores amigos. Jugaron en el gran patio de la casa del cumpleañero. Poco a poco habían llegado más invitados incluido Taehyung y Jungkook, amigos de JiMin quienes le harían compañia.

Luego de que llegaran todos los invitados del cumpleañero, fueron al gran patio donde estaba la mesa y todos tomaron asiento para conversar y claro, comer.

-Oye YoonGi- le llamó Hoseok y el cumpleañero volteó en la dirección que apuntaba el dedo de su mejor amigo. Era JiMin.

-Hyung- dijo en voz baja al ver que gran parte de las miradas en aquella mesa se dirigían a el -Podría darme tres de eso pastelillos, po-por favor- dijo en un hilo de voz, para que solo su Hyung lo oyera.

-Claro JiMinie- Tomó 3 de aquellos pastelillos, intento entregárselos al menor, pero las manos de este era muy pequeñitas como para llevar tres a la vez así que YoonGi se levantó de la mesa y los llevó el mismo a la pequeña mesita en el interior de la casa donde se encontraba JiMin y sus dos amigos.
Dejó los pastelillos en la mesa y revolvió los cabellos de JiMin.

Cuando volvió a su mesa sus tres mejores amigos guardaban silencio mientras que el resto hablaba de distintas cosas.

-¿Qué?- Dijo YoonGi confundido al ver que ninguno hablaba. Namjoon explotó en risas al igual que SeokJin y Hoseok y el pelinegro los vió extrañado.

-JiMinie- Namjoon dijo imitando la voz tan dulce con la que YoonGi se había dirigido al menor.

-Ay ya callense- dijo fastidiado.

Comieron y jugaron hasta más no poder. Los invitados empezaban a irse. Menos SeokJin, Namjoon y Hoseok quienes se quedaron hasta más tarde para ir al parque al que iban todos los años.

Iban a empezar a correr para ver quien llegaba al último, pero justo antes de que Namjoon dijiese "tres" JiMin llamó al pelinegro.

-Hyung- los cuatro miraron al castaño quien se encontraba al otro lado de la reja de metal blanca.

-Que quieres JiMin- YoonGi dijo con fastidio había decidido no mostrar afecto hacia el menor, al menos no en público.
¿JiMin? El mayor solo le llamaba así cuando lo estaba regañando.

-N-Nada, hyung- YoonGi rodó los ojos y Namjoon volvió a contar hasta tres para luego salir corriendo en grupo hacia el parque.

JiMin se sentó en el patio delantero con la pequeña pulsera de lana negra y blanca. Era un regalo simple pero el lo hizo a base de los colores que más usaba su hyung. Lo hizo con cariño para su hyung preferido pero el parecía estar enojado con el. Dejó escapar una lagrimita que se deslizó por su regordetas mejillas. Se levantó, limpio su lágrima y guardo la pulserita en su bolsillo para luego entrar a la casa.