Tengo que ser fuerte.

Parte 1

No tenía ningún sentido, era mamá, ella no nos haría esto, ella nos amaba, verdad?
Mi hermano menor a mi lado rompió mis pensamiento, me abrazo mientras lágrimas caían de sus ojos, no sabía que hacer, ella no tenía razones para esto, somos sus hijos, porque nos dejaría así, sin una nota o un adiós..
El golpe en la mesa hizo temblar a mi pequeño hermano que no paraba de llorar, fue Alex quien se levantó y se fue, sin siquiera escuchar a mi padre que le exija que volviera.
Solo podía mirar al suelo, ni siquiera escuché lo que dijo mi padre antes de levantarse, tomé a mi pequeño hermano en brazos y subí las escaleras, pude escuchar como mi hermano golpeaba el saco de boxeo al otro lado de la puerta, seguí de largo hasta el cuarto de Tintin, lo deje en su cama, de tanto llorar se había dormido, pude ver en su reloj que eran ya las once de la noche, salí de su cuarto y cerré la puerta.
No pude más, la rabia pedía salir de mi y llore, llore como jamás en mis 17 años y sentí como el pánico me invadía, mi cabeza dolía y solo podía repetir en mi mente porque, porque nos dejaría, a mi hermano, solo tenía 7 años, era un niño, ni siquiera había empezado la escuela, y papá ni siquiera iba a estar aquí el próximo año, porque nos hizo esto, porque me hizo esto...

Sentí la dura madera de la puerta y la voz de mi hermano llamándome, lo primero que vi fueron sus ojos verdes rojos e inchados

-No deberías dormir en el suelo- me dio su mano derecha para que pudiera levantarme, tenía una venda manchada de sangre en ella

-La pared no tiene la culpa- dije mientras señalaba su mano

-No, pero ella si.- arrastró el "ella" como si el decirlo le supiera a veneno en la boca- papá quiere hablar con nosotros, sin Austin.

Fui la primera en bajar las escaleras y ver a mi padre con la vista fija en el mármol y apoyado en la mesada con los puños apretados, al vernos trato de suavizar su mirada con poco éxito, atinó a mirarme a mi y extenderme su brazo, sin dudarlo lo abracé y mire a Alex mientras le extendía mi mano, los tres nos abrazamos, en aquel silencio solo se escuchaba mis leves sollozos.

-De verdad lo siento niños- dijo mi padre mientras nos soltaba

-Ella dijo algo?- sentí mi voz quebrarse y los ojos azules de mi padre me miraron, su mirada se volvió fría y su voz cortante al responder

-No, solo tomo sus cosas  y se fue a mitad de la noche hace tres días, dejo una nota, pero ni un adiós, solo se fue.- Escuché como su voz se quebraba pero se mantuvo fuerte, por nosotros, vi a Alexander tensar sus puños y atiné a tomar la mano de mi gemelo.- Tenemos asuntos más importantes, el año siguiente yo no voy a estar en el país, lo saben y no puedo dejarlos solos, mucho menos con Austin aquí, estoy considerando llevarlos conmigo

-Ja estás demente?- Dije con sarcasmo-De verdad consideras llevarnos a Los Ángeles por todo un año? Perderíamos el año escolar y tenemos amigos aquí, además está Brandon- escuché a mi hermano bufar al decir el nombre de mi novio

-Si fuera por el nos vamos ya- escuché a mi hermano mientras soltaba mi mano y se cruzaba de brazos, lo ignore y mire a mi padre

-Es solo una consideración, además no nos iríamos un año, directamente no volveríamos, tengo negocios importantes a partir del siguiente año, la empresa florece descomunalmente y va a requerir toda mi atención, Michael ya no puede solo con la empresa , sus abuelos viven allí, sus tías y amigos míos

-Abuelos que vemos una vez cada 5 años no son abuelos, sin mencionar que el te abandono cuando tenías nuestra edad- Alex hablo con desprecio en su voz y la cara de mi padre se torció, se puso firme y mirando fijo a mi hermano hablo

-Como vuelvas a faltarles el respeto te bajo los dientes, me entendiste?- Mi hermano no se movió, mi padre le sacaba solo media cabeza y Alex era un terco, así que me puse entre medio de ellos, al ser más baja me costó bastante separarlos

-No tenemos tiempo para sus peleas de macho alfa, Alex ve y báñate tienes olor a muerto- Mi hermano solo se fue dándole una mirada fría a mi padre- Como vamos a resolver esto?

-Yo me voy a encarg..- No lo deje terminar

-No. Mamá ya no está aquí y no tienes que hacerlo todo solo, las clases ya comenzaron aquí, pero en Los Ángeles comienzan en septiembre, estamos a 10 de agosto papá, sería posible mudarnos sin atrasarnos con la escuela pero eso no sería hasta el siguiente año verdad?

-Lo más conveniente sería hacerlo este mes, no perderían el año y hacer su último año en una institución estadounidense les dé más chances de entrar a una universidad de allí, además no van a estar solos, mis amigos tienen hijos de su edad, hasta podrían ser amigos- suspiré, de verdad está considerando esto, me preocupa Alex, yo solo tengo a Brandon y Brooke pero el tiene demasiado amigos, sabían que siempre uno de los gemelos es más sociable que el otro? Bueno mi hermano es el sociable

-No sé cómo Alex se va a tomar esto papá

-Te tiene a tí, va a estar bien- me dio un beso en la frente y me preguntó si tenía hambre, nege con la cabeza.

–Papá... Que decía? La nota que decía?– Saco un papel arrugado de su bolsillo y me la dio

"No puedo más
                                  -Emilia"

Repetía esas palabras en mi cabeza, "no puedo más" no dijo más que eso, le di la nota a mi padre y salí de la cocina con dirección a mi cuarto, son demasiadas cosas, mamá se fue, papá quiere dar un giro de 180° a nuestras vidas, dejaría de ver a Brandon...
Mi teléfono comenzó a sonar y parece que lo invoque

-Porque carajos no me contestas, te estoy llamando y mandándote mensajes hace 10 minutos, te das cuenta de que nunca estás para mí? Discutí con mi madre y vos seguro estaba hablando con un tarado de tu curso. Siempre sos vos, vos y vos. Después te ofendes cuando yo no tengo ganas de hablar y...- deje de escuchar lo que decía, estoy harta, son demasiadas cosas.

-¡Deja de hablarme así! ¡Lo odio! Odio que me hagas sentir como una basura cada vez que abres la boca, no sos el único que tiene problemas Brandon, lamento que discutas con tu madre y que tus hermanos toquen tus cosas pero se más hombre y aguantatela antes de agarrártelas conmigo, además tú madre hace todo lo que puede, son 5 hombre y una mujer los que tiene que criar así que podrías poner de tu parte y dejar de tratarla como una mierda.- fue lo último que le dije antes de cortar, ni medio minuto paso para que volviera a llamarme, apague el maldito celular y me acosté.

Eran las dos de la mañana cuando mi hermano pequeño entro a mi cuarto con su osito en brazos, le abrí mi cama y corrió a mi lado, atrás de él estaba Alex con una almohada en su mano

-El... no podía dormir y ahora yo tampoco...em- le extendí mi mano para que viniera, mi hermano menor se puso entre medio de nosotros con su peluche a un lado

-Isa me lees un cuento?- dijo mi pequeño hermano mirándome, me pare para buscar un cuento a su cuarto y me encontré a mi padre en el pasillo mirando un cuadro de mi madre

-No es tu culpa- dije pero el no dejo de mirar el cuadro, hipnotizado

-Tu eres igual a ella Elisa, su carisma la tiene tu hermano, pero todo esa inteligencia, y belleza la tienes tú

-No es algo inteligente dejar a tu familia papá, mamá fue una gran mujer pero no soy como ella, soy como tú, lo hago todo por mi familia, al igual que tú- tome su mano y me miro- No es tu culpa las decisiones que ella tomo- nos quedamos un momento ahí, mirando a mi madre, sus ojos color miel y rizos castaños como los míos parecían perfectos, ella parecía perfecta- porque no nos acompañas? Tintín y Al están en mi cuarto y vamos a leer un cuento- el me sonrió y fue a mi cuarto mientras yo buscaba el libro favorito de mi hermano, al volver vi a Alex y Austin golpeando a papá con almohadas, al verme sonriendo en el marco de la puerta me sonrieron para después tirarme tres almohadas a la cara

-Con que así quieren jugar!- agarré una grande y golpee a mi hermanos, así pasamos esa madrugada, con almohadas, estornudos por mis alegrías y las de mi gemelo, cuentos de terror que hacían llorar a mi pequeño hermano y risas, por primera vez en toda la noche, escuché reír a mi padre y eso me hizo pensar que quizás, que mi madre se fuera no era el fin de nuestro mundo, al menos no hoy.