Capítulo 27

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- Adiós Kakashi-sensei.

- ...

Me fui caminando, dándole la espalda a Kakashi. Salí del desierto y entre a un bosque.

Mientras caminaba oía ruidos, esos ruidos no eran normales. Me hacían daño a mis orejas de demonio.

- Agh! Que dolor más insoportable!

Oí unas risas, que venían de alrededor.

- Jeje...

- ¿Quien esta aquí? ¡Que de la cara!

Aparecieron dos chicos y una chica.

Aparecieron dos chicos y una chica

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- Vaya vaya, ¿quien tenemos aquí?

- ¿A caso me conoces? =_=

- No

- Entonces no digas a quien tenemos aquí sino me conoces, imbécil

- Tsk... Si tanto te gusta hablar, ¡escucha mas el precioso sonido de mis ondas!

Él extendió sus manos por lo que en sus palmas se veían unos agujeros que se notaban profundos, como tubos y de repente, unas ondas se dirigieron a mí por los pelos pude esquivarlos pero ese sonido era doloroso para mis orejas

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Él extendió sus manos por lo que en sus palmas se veían unos agujeros que se notaban profundos, como tubos y de repente, unas ondas se dirigieron a mí por los pelos pude esquivarlos pero ese sonido era doloroso para mis orejas.

- ¡Agh! ¡Mis orejas!

- Jeje

De repente la chica me agarro por detrás, no por la espalda sino por el pelo.

- ¿Eh? Que pelo mas raro tienes ¿no? No queda bien contigo.

- Suelta mi pelo, nadie te critica con lo fea que eres.

- Hmp... Veras quien se volverá fea ahora.

Ella estiro mas mi pelo, haciendo que me duela.

- ¡AAHHHH! ¡Suelta!

- Esto pasa por decir lo que me dijiste.

Al agarrarme del pelo me hizo recordar que de pequeña, me acosaban por mi pelo porque no era igual que ellos, solo por tener un pelo diferente color y raro, por lo que empecé a soltar lágrimas, con la cabeza agachada.

- Jajaja ¡vaya que fuerte se cree!

Apreté mi puño y dije.

- ¿Piensas que a mi me gusta mi pelo? ¿Piensas que con tener este pelo no me acosan? ¿Que con tener este pelo me quieren los demás? ¡Te equivocas!

Agarre un kunai.

- Espera, ¿que vas a hacer?

La mire sonriendo.

- Lo que tuve que hacer hace mucho tiempo

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- Lo que tuve que hacer hace mucho tiempo.

Puse el kunai a lado de mi pelo y me lo corté.

Puse el kunai a lado de mi pelo y me lo corté

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- Ahora si que vais a lamentarlo.

- Ja, eso ya lo veremos, ni siquiera eres fuerte, solo te lo crees. ¿Piensas que nos hará daño con esas manos inútiles?

Dijo el chico de los agujeros de sus manos.

Baje la mirada y mi cabeza por lo que empecé a reírme sin sentido.

- Con qué... Manos inútiles ¿eh?

Subí mi mirada y se veía el Sharigan y un montón de manchas negras por mi cara

Subí mi mirada y se veía el Sharigan y un montón de manchas negras por mi cara

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- Hoy... Morirás... Tranquilo, haré que sea menos doloroso para ti, como a tus amigos

El chico de vendas se quedo mirándome

- ¿Como puede ser? Ella posee el Sharigan, pero... Es imposible, a menos... ¡Zaku! ¡No la subestimes, ella...!

- Dosu, ¿enserio crees que podrá hacerme algo?

Me acerque a el y lo agarré de las manos.

- Sería una pena que se te rompan las manos, ¿verdad que si?

Podía notar en un instante el miedo que tenía al decir eso, y apreté sus manos, haciendo que cruja.

- ¿Que tal si empezamos ahora rompiendotelas? No, mejor lo hacemos rápido, te prometí que seria menos doloroso

Cada vez se lo doblaba aun mas el sonido del crujido aumentaba y el gritaba, el chico de vendas estaba horrorizado al tal espectáculo igual que la chica.

- ¡Esto os enseñara a no subestimarme!

Tire bruscamente al chico ya que les deje sus manos destrozadas y la chica y el chico de vendas se acercaron a él.

- Nos volveremos a ver, pero la próxima ganaremos nosotros.

En realidad quien soy?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora