12/08/2019
Escuche tu risa cuando entre al colectivo, pague y cuando iba a mi asiento habitual, vos te encontrabas ahí, sola.
Estabas mirando un vídeo y de vez en cuando reías de ello.
Valentín ya no tomaba el colectivo, mi teoría era que le dolía verte y que no se esperaba mi beso.
Cuando me senté a tu lado, paraste el vídeo y empezaste a hablar conmigo.
Reímos todo el viaje, yo no podía dejar de mirar tus ojos color marrón, eran hermosos.
Ese día pude jurar que estaba loca y perdidamente enamorada de vos.