Ahí en aquella habitación en la gran cama matrimonial estaba la pequeña Rosé abrazada a su querida hermanastra Jisoo.
-Te quiero mucho hermanita.- Sonreía con sus ojitos cerrados.
-Y yo a ti te quiero más.- La contraria le dió un beso en su frente y procedió a apagar la lámpara a lo que la pequeña Rosé se asustó.
-No me sueltes...
-¿Tienes miedo...?- Pregunto la pelinegra.
-Hay monstruos que vienen por mi...- Se escuchó ramas chocando en la ventana lo que provocó que la menor se aferrará a la mayor casi temblando.
-Chae... Tranquila, yo estoy aquí.- Tomo su mentón y le sonrió tiernamente.- Golpeare a los monstruos y fantasmas, yo te protegeré hermanita
Rosé se sintió segura ante esto y procedió a dormirse junto a su hermanastra.
A la mañana siguiente...
Rosé y Jisoo estaban riendo juntas ya que estaban tomando un baño y las dos estaban metidas en la bañera que estaba llena de espuma.
-¡Burbujas!- La menor le ponía un poco de espuma a su hermanastra.
-¡Oye!- Reía la pelinegra y procedió a hacer lo mismo.
-Niñas ¿ya quieren salir?- Pregunto la madrastra de Jisoo y madre de Rosé sonriente mientras entraba al baño y veía a los jugando.
-¡Noo!- Gritaron las dos al mismo tiempo mientras seguían jugando.
La mujer solo largo una pequeña risa y salió nuevamente del baño, le agrada tanto que su hija e hijastra se quieran mucho y se considerarán hermanas de sangre.
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Los años pasaron sumamente rápido Rosé y Jisoo crecieron, ya no eran niñas de 3-4 años, ahora tenían 18-19 y aún que no lo pareciera aún dormían juntas en la misma habitación esto a ambos padres les preocupaba ya que cada vez que las querían separar Rosé se negaba rotundamente al igual que Jisoo.
-¿Que pasará si mamá y papá nos separa?- Pregunto Rosé triste mirando a la pelinegra.
-Rosé... Tienes que entender que ya estamos grandes... Ellos lo ven raro pero nosotras no...- Jisoo tocó su mejilla.- Aún así... No creo que nos separen mañana, siempre lo dicen pero nunca lo hacen.- Río
-Tienes razón.- Río Rosé y tocó la mano de la pelinegra.
Al hacer esto ambas chicas se sonrojaron y sonrieron su corazón latir, para Jisoo su hermanastra era como la mujer de sus sueños, Rosé era tan tierna y tan dulce que podía derretir su corazón, y aún que no lo quisieran admitir ambas chicas no solo se tenían un cariño de hermanas, se querían más allá de eso.
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PROHIBIDO... | ChaeSoo Three shot
FanfictionRosé y Jisoo son hermanastras, solo que a causa de estar juntas desde bebés las hizo crecer creyendo que son hermanas de sangre, y son tan unidas a tal grado de hacer todo juntas.