En este momento más que en cualquier otro lo único que quería era mandar a todos a la chucha. No lograba entender como tanto estudio no servía de nada, cuando solo habían 3 preguntas en el certamen. Estaba cursando mi cuarto año de psicología, mis padres no me brindaron su apoyo puesto que pensaban que no tendría un futuro tan brillante como si hubiera estudiado una ingeniería o algo relacionado a salud.
—Mierda—murmuré tras darle de lleno con la puerta a un hombre—Lo siento...no te vi...
—Deberías tener más cuidado po—se quejó aun con la mano en su frente. Me acerque sin entender del todo la razón. Quite su mano cuidadosamente y me fije en como estaba roja esa zona.
—Alexis, ¿nos podemos tomar una foto? —salí de mi ensueño notando como un niño hablaba emocionado.
Entonces observe a el hombre frente a mi y era nada más y nada menos que Alexis Sánchez. Conchetumadre, mi día no podría ir peor.
—Obvio—dijo Alexis mirándome extraño, me aleje unos metros notando como la gente se comenzaba a acercar.
¿Me quedo o me voy? Solo eso pasaba por mi mente, no se cuanto tiempo abre estado así pero me sobresalte cuando una mano se puso en mi hombro.
—¿Quieres algo? — Alexis estaba frente a mi mirándome sin mayor expresión.
—¿Qué? No—dije rápido.
—¿por qué no te vai entonces?—abrí la boca para decir algo pero tenía razón—o sea, se que soy hermoso pero...
—Mira, disculpa por el incidente y adiós—dije pesada, tenia que ser un egocéntrico de mierda.
—Oye—sentí su presencia, mire sobre mi hombro—Disculpa por mi actitud, yo no soy así.
—Da igual—le sonreí—No quiero dejarme llevar por mis prejuicios, así que olvidaré eso.
—¿Prejuicios? —pregunto mirándome.
—Si, ya sabes futbolista egocéntrico—rodé los ojos—Bien, fue agradable conocerte, adiós.
—Espera, ¿cuál es tu nombre? —preguntó antes que me moviera.
—Julieta—dije suspirando.
—Es un gusto, Julieta—sonrió, me gire y finalmente me fui.
Al llegar a mi departamento, el cual compartía con Lorena, una estudiante de informática, recordé lo sucedido, solo esperaba que las próximas evaluaciones me fuera mejor.
—Llegas tarde—dijo Lorena una vez pase por fuera de su pieza.
—Necesitaba distraerme, no me fue muy bien hoy—suspire y la imagen de Alexis me hizo sonreír.
—Al parecer la distracción estuvo bien—movio sus cejas, negué y me lance a su cama, tenía encendida la TV.
—Ya se viene la Copa América—comente distraída viendo los comentarios, nadie esperaba mucho de la selección, lo que me hacía pensar en la presión a la que se enfrentan ellos.
—Sip—dijo emocionada—Al parecer mi papá consiguió entradas—la mire confundida—¿lo olvidaste? El trabaja en Juan Pinto Durán...
—Oh—dije recordando cuando hablamos sobre nuestros padres, Lore es una gran fanática del fútbol, al igual que su padre.
—Papá no podrá venir—dijo mirándome—por lo que se me ocurrió que tu me podrías acompañar.
—¿Qué?—pregunté confundida—Pero...
—Por favor Juli, mi mamá odia el fútbol y terminé con Samuel—me puso esa cara encantadora a la cual no puedo decir "no".
—¿Qué pasa con la U? —suspire casi aceptando—¿el dinero? ¿Alojamiento?
—¿No fuiste a tu asamblea? —preguntó, negué—La U está en paro indefinido y en cuanto a el dinero y alojamiento, ¿Conoces a Charles Aranguiz?
—Sí—dije sin dudar, según mi punto de vista el es el uno de los mejores.
—Bueno el fue quien nos consiguió todo, al parecer le tiene bastante cariño a mi padre—sonrió orgullosa, su padre es un hombre genial, con mucha humildad.
—De acuerdo—dije suspirando—Iremos.
