Entre a la empresa, el señor Ji me detuvo antes de entrar a su despacho.
- El señor Gong está en una junta muy importante señora, tardará porque no lo espera en casa?
- Esta bien, pero podría detenerme a mi hijo mientras voy al sanitario?- Él asintió y se quedó con el bebé, yo salí de allí y fui por la otra puerta para entrar desde la sala de juntas a su despacho, estaba por abrir la puerta de su oficina cuando reconocí su voz.
- Eres un bastardo!
- Si, lo soy, dime Soo, que se siente perder a tu mujer y a tu hijo gracias a mi?
- Ese bebé es mío?
- Si.- dijo en tono burlón.- Era, ahora ese niño es mío, se llama Gong Kwan Jung.
- Eres un mal nacido!
- tal vez, pero tu eres peor que yo, le ocultaste a Hee todo sobre ti, quien eres, a que te dedicas y por supuesto, que estabas comprometido.
- Iba a solucionar eso, sólo necesitaba tiempo.
- Un año, necesitabas un año para solucionarlo, pero no hiciste nada, te comprometiste con Yoona.
- Es lo que te duele verdad? Que Yoona me quiera a mi cuando tu has estado enamorado de ella desde que era una niña.- escuché un golpe, para ese momento no podía contener mis lágrimas.- adivina, ambas mujeres que tu quieres me quieren a mi.
- Cállate idiota- abrí la puerta y ambos se quedaron paralizados.
- Lo sabias- Yoo intentó acercarse a mi.
- Puedo explicarlo.
- Y que me vas a decir? Que me utilizaste para vengarte de Soo? Que no estás enamorado de Yoona? Que toda esa preocupación por mi era falsa?! Que eres un maldito mentiroso?!!
- Hee...- mire a Soo y alce una mano para que se quedará donde estaba.
- Y tu no eres mejor, me dejaste, me mentiste, me engañaste.- me di media vuelta y camine a la puerta para salir de allí.
- Amor...- lo empuje aunque no lo moví ni un milímetro.
- Alejate de mi y de mi hijo- le di una bofetada.
- Amor...
- No me llames así!! No quiero volver a verte en mi vida.- tome a mi hijo de los brazos de Ji y salí de allí, tome un taxi y fui a casa de mis padres, le deje a mi hijo y me encerre en mi habitación a llorar.Él no me busco, en todo ese tiempo no fue ni una vez a verme a la granja, llevaba seis meses allí y jamás me llamó. Al final Soo se había casado con Yoona, esperaba que la hiciera feliz, ella lo merecía.
Estacione la camioneta y baje para comenzar a subir las cajas vacías del mercado.
- Permíteme ayudarte- sonreí y Wook comenzó a subir las cajas, era un hombre muy apuesto y todas las chicas del mercado estaban enamoradas de él.
- Gracias Wook- Él me regaló una de sus sonrisas rompe corazones.
- Trabajas mucho, creo que deberías salir un poco, porque no vamos al cine o a comer un helado- dijo recargandose en mi camioneta.
- No puedo- dije apenada.
- Vamos, se que nos vamos a divertir- dijo acariciando mi brazo.
- Te contaré esa mano sino dejas de tocar a mi esposa- me sobresalte al escuchar su voz molesta.
- Oye amigo, no sé quién eres pero deja de molestar- trato de empujarlo pero Yoo lo golpeó en la cara haciéndolo caer.
- Que te pasa!!- trate de acercarme a Wook para ver como estaba pero Yoo me tomo de la cintura y me arrastró a su auto, forceje con él pero no pude librarme.- Estas loco?! como pudiste golpearlo!
- Estaba coqueteandote- dijo con simpleza.
- Déjame bajar- trate de abrir la puerta pero no pude, me crucé de brazos y mire por la ventana. Me llevo a mi casa y sólo allí por fin pude bajar, camine hasta la puerta pero me detuvo antes de entrar.
- No quiero verte cerca de ese tipo- reí burlonamente.
- No eres nadie para mandarme.
- Soy tu esposo aún.
- Sólo seis meses más y podremos divorciarnos.
- No lo permitiré.
- Para Que quieres que siga atada a ti?! toma tu libertad y busca a otra! eso debiste haber estado haciendo estos seis meses, digo para no buscarme ni a tu hijo.
- Pensé que no querías verme, y por supuesto que he visto a mi hijo, le pedí a tus padres que no te dijeran nada para que no te molestara. Estos seis meses sólo estuve siguiendote, viéndote hacer tu vida sin mi, entiendo que me odies, te oculte muchas cosas y si, al principio sólo fue para vengarme de Soo, pero te conocí, eres la mujer más dulce y hermosa que he conocido, me enamoré de ti sin darme cuenta, y me hacías el hombre más feliz al estar a mi lado.
- Yo no te odio- Baje la mirada, el tomo mi barbilla y nos miramos a los ojos.
- Lo siento Amor, debi ser honesto contigo pero te amo tanto y no quería perderte.
- Dilo nuevamente.
- No quería perderte
- eso no, lo otro.
- Te Amo- sonreí y lo besé, me aferre a su cuello
- Yo también te amo- sonrió- pero...- bajo la mirada- nunca vuelvas a mentirme o está vez me divorciare de ti y te dejaré en la calle.
- Puedes dejarme en la calle pero jamás me dejes a mi- acaricio mi mejilla y beso todo mi rostro.Mis padres se pusieron muy contentos con nuestra reconciliación, cenamos juntos y después Yoo me ayudó a dormir a nuestro hijo, abrí las cobijas para que se acostara a mi lado y me acerqué a su pecho.
- Creo que a Jung le hace falta una hermanita.- sonreí y lo besé.
- Ahora que recuerdo, en casa de mis padres no lo hemos hecho aún- Yoo pareció pensarlo.
- Tienes razón, aún hay muchos lugares donde tenemos que hacerlo- reí y lo besé.
- Te amo señor Gong.
- Te amo señora Gong.