Just For Fun ~SeHo/HunHo~ ADAPTACIÓN

XV

Jun Myeon entró al cuarto de nuevo y fue hasta la cama de Se Hun. Su amigo dormía tranquilo, sin imaginarse lo mal que se lo estaba haciendo pasar. Por unos instantes se enfadó con él, preguntándole desde su cabeza como podía provocarle tanta confusión. Sin pensárselo más, se metió en la cama, rostro frente a rostro con su menor. Éste notó algo desde sus sueños, porque a los segundos abrió los ojos con cierta dificultad.

-¿Hyung...?- preguntó, todavía medio dormido y sin acabar de distinguir que estaba en la realidad- Ah, Jun Myeon...- suspiró, colocando un brazo sobre los hombros del otro chico. Este se sorprendió, ya que no se lo esperaba para nada.

-Se Hun... -musitó, viendo como el otro cerraba los ojos. Se mordió el labio inferior, recordando de nuevo ese personaje que en la historia, introducía su mano por la camiseta del otro. Imitó las acciones del personaje. Sus dedos tocaron piel fina y los pasó por la espalda del que dormitaba, acercando su cuerpo un poco más. A medida que lo tocaba, no pudo resistirse más y juntó sus labios. La boca de Se Hun respondió por impulso, abriéndose y dejándole maniobrar. Jun Myeon no sabía muy bien qué estaba haciendo, pero el caso era que no quería detenerse, así que poco a poco, aumentó la intensidad de sus besos.

De repente, notó unas manos sobre su pecho, intentando apartarlo. Lo consiguieron, pero solo unos centímetros. Miró a Se Hun, quien con los ojos muy abiertos y sonrojado; tanto, que podía verlo incluso en la oscuridad; no parecía entender qué estaba sucediendo.

-¿H-Hyung?- repitió, pero esta vez siendo consciente de que si, era la realidad.

-Se Hun...- susurró su nombre como si fuera una nueva caricia en el cuerpo y notó como el otro se estremecía. De repente, se dio cuenta de la situación en la que se encontraban, y lo que estaban haciendo. ¡Haciéndole a su amigo! Sacó la mano de dentro de su ropa y se levantó, tropezando con las sábanas y estando a punto de caer. Se quedaron los dos en silencio, esperando a saber si alguno de sus compañeros se había despertado. El ronquido de Chan Yeol les hizo comprobar que estaban a salvo.

-Buenas noches.- fue todo lo que le dijo, volviendo a su cama y encogiéndose una vez dentro. Se Hun no dijo nada más, aunque por supuesto, no fueron capaces de volverse a dormir.

¿Qué era lo que le estaba pasando?