SIEMPRE CONTIGO [Tonks y Lupin]

Parte 1 de 1

La batalla había terminado, Tonks se levantó, estaba algo sucia y no se dio cuanta que se encontraba en un lugar diferente al ultimo que recordaba, cuando un rayo de luz verde salió de la punta de la barita de su propia tía, pero eso no importo, en lo único que fijo su vista era en el hombre que se encontraba de pie a escasos metros de ella, sus miradas se encontraron y ella corrió hacia el abriendo los brazos, ambos se abrazaron por un instante para luego separarse y verse a los ojos -Lo logramos, estamos vivos- Dijo ella con una prominente sonrisa en los labios, el solo se dispuso a verla con una leve sonrisa pero sus ojos estaban húmedos y pronto las lágrimas comenzaron a brotar de ellos.

Por un instante hubo un incomodo silencio Lupin negó con la cabeza y jalo a sus amada para volver a abrazarla.

Tonks se separó del abrazo luego de un instante -Que pasa? Se supone que estemos felices!- Dijo aun sonriendo mientras veía a Lupin a los ojos.

Este la veía con ternura incapaz de decirle lo que pasaba, fijo su mirada en la esquina de la habitación en la que había una cuna, solo entonces Tonks pudo ver con claridad el lugar en el que se encontraba.

Se separó de Lupin y corrió a la cuna en la que pudo ver a uno de los seres que mas amaba en el mundo, un pequeño bebe, indefenso, solo entonces Tonks lo comprendió, sus ojos comenzaron a humedeserse y pronto las lágrimas comenzaron a salir de estos, se recargo en la cuna mientras tapaba su rostro con sus manos, Lupin se acercó a ella lentamente y puso una temblorosa mano en el hombro de Tonks.

Ella volteo y miro a su amado a la cara, el también lloraba. - N...no, no, no quiero esto- Gimoteo ella mientras de sus ojos seguían brotando las lágrimas.

Lupin la tomo del brazo y la abrazo fuerte contra su pecho. -Esta bien, el no estará solo- Dijo con una voz quebrada mientras seguía abrazando a Tonks.

La joven bruja no podía dejar de llorar, no podía, ni quería aceptar lo que estaba pasando, no quería dejar a su hijo, Lupin lloraba con ella.

Luego de un rato se separaron ambos vieron a su hijo con ternura, aun con lágrimas en los ojos. -Estaremos siempre con el- Comento Lupin mientras dejaba de ver a su hijo y veía a Tonks.

Siempre- Contesto ella un poco mas tranquila, simulo tocar la mejilla de su hijo y luego vio a Lupin, este le regalo una sonrisa leve y paso su brazo por sus hombros.

Ambos volvieron a ver a su hijo y aun con lágrimas en los ojos pero con una sonrisa tierna desaparecieron de la habitación.