Capítulo 2: Ahora soy parte de tu familia.

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Narrador universal:

Después de esa reunión con sus socios, Bruce Di Salvo llegó a su casa agotado y lo primero que hizo fue ir al cuarto de su hija. Toco la puerta tres veces y como no recibió respuesta decidió entrar. Abrió la puerta y vio a su hija acostada en su cama por encima de sus cobijas y dormida con un libro al lado de ella. Se acerco con dulzura y puso el libro en el buró que tenía al lado de su cama. Miró a su niña con dulzura. Había tenido una infancia difícil. Su madre había muerto cuando solo tenia 6 años, a causa de una bala, cuya trayectoria se desconocía. La madre de Dayna, Juliett, era todo el mundo de Bruce y desde su muerte se propuso que no permitiría que algo le pasara a su única hija.

A pesar de su trabajo y de su deseo porque su hija formara parte de su legado quería que ella fuera feliz. Al lado de un hombre que la aceptara y la amara sin importar nada.

Por eso mismo había pensado que la idea de Jeremiah era muy buena. Así obtendría lo mejor para su hija, solo lo mejor.

Salió de la habitación cansado. Mañana seria un largo día, debía ir con Jeremiah a un almacén; solo los dos. Tenia un buen presentimiento y esperaba que se cumpliera. Con esto en mente se fue a dormir. Mañana sería otro día.

En otro lado de la ciudad.

Detec.Wine: Mañana tendrás que ir a esta dirección. Ya sabes que hacer.

Christian: Lo se; es seguro?

Detec.Wine: Hasta donde tengo entendido sí. Aun así irán armados; es mejor no arriesgarse.

Christian: Cómo sabemos que me aceptaran?

Detec.Wine: Están buscando a quien seduzca a su hija. Tu eres el hombre adecuado.

Christian: Bien, supongo que debo alistarme.

Al otro día en la mañana.

Bruce: Buenos días, hija.

Dayna: Hola papá.

Bruce: Supongo que quieres desayunar.

Dayna: Cuál es la condición?

Bruce: Hoy no hay ninguna.

Dayna: Ok, a qué se debe tu buen humor?

Bruce: No lo se. Siento que ocurrirá algo grande.

Dayna: Ese algo grande tiene que ver conmigo?

Bruce: No lo se. Hoy en la noche no estaré.

Dayna: Por?

Bruce: Tengo que ir con Jeremiah a arreglar unos asuntos.

Dayna: Saludalo de mi parte.

Bruce: Te agrada Jeremiah?

Dayna: No tanto.

Bruce: Ok.

No platicaron mas y comenzaron a comer. Después de desayunar Dayna se fue a su cuarto y Bruce a su oficina. No se hablaron durante mucho rato, incluso comieron cada uno en su cuarto.

En la noche Bruce salio de su casa sin decir nada y fue a su auto donde lo esperaba Jeremiah.

Al llegar al almacén los dos se bajaron del auto sin decir nada. En ese momento oyeron una voz cerca de ellos.

Xx: Policía, levante las manos!!!

Voltearon y vieron a dos hombres armados que les apuntaban. Bruce y Jeremiah se miraron y alzaron las manos. No valía la pena resistirse, no tenían guardaespaldas ni armas. De pronto se escucho otra voz, mas juvenil y segura.

Between the love and the mafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora