Señor y Señora Winter♥© (#3)

Superación Hormonal

Primer mes

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Dilan y yo nos encontrábamos en el parque de diversiones, hoy es mi día libre, por lo tanto casi le rogué a mi novio que me trajera aquí, pues quería salir de la monotonía del diario vivir.

Las personas iban y venían sin reparo alguno, unas corriendo de aquí para allá y otra jugando en los distintos juegos temáticos del parque. Los niños corrían gritando y jugando. Recordándome a esa vez cuando Dilan me llevo al parque, esa vez cuando me compro el helado y una niña le dijo que era raro, por pedir solo un helado de mantecado. Sin poder evitarlo suelto una pequeña risa captando así la atención de Dilan, el cual detiene su caminata para mirarme con una ceja alzada.

—Creo que ya te volviste loca. —Inquiere, mostrándome una perceptible sonrisa. No lo puedo evitar más y suelto una gran carcajada, para colocar mi cabeza en su hombro. —Sí, ya te volviste loca.

Niego para mirarlo.

—No es eso Dilan, es solo que estos niños me recordaron a algo. —Acaricio su mano, emprendiendo la caminata hasta una de las bancas del parque, pues ya llevábamos varios minutos caminando, explorando el parque.

Siento la mirada de Dilan sobre mí, curioso ante mis palabras.

—Es solo que recordé aquella vez cuando fuimos a comprar helado. —Llevo mi mirada hasta el frente, dónde se encuentra una pareja muy acaramelada, demostrando su amor mutuo. Cómo quisiera que Dilan fuera así en público, pero pedirle eso, es como decirle al sol que deje de salir cada mañana.

>>Imposible...<<

—Muchas veces te lleve a comer helado, Dandelion. —Comenta, sin inmutarse de que no lo miraba a él ahora, sino a la feliz pareja.

—Lo sé, pero sólo una vez una niña se nos acercó y te llamo raro.

—Mucho fue que no me llamo gay, porque en ese tiempo todos me lo decían. —Niega, soltando un resoplido. —Esa niña peor que el demonio. —Gruñe, recordando esa primera vez que compartí un helado con él. Y descubrí de cierta forma que a mi novio no le gustaban las cosas dulces.

Ahora me pregunto, ¿Dilan será igual que Haniel?

Le darán los mismos síntomas del embrazo, como lo hizo Haniel con Hanna.

Es algo que debía descubrir con el pasar de los meses, pues ahora solo cuento con un mes y medio de embarazo, y, a diferencia de Hanna, yo si le conté a Dilan sobre mi embarazo. Claro, al principio estaba asustada, como cualquier otra persona que se acaba de enterar de que estaba embarazada. Además estaba el hecho de que mi trauma apareciera de un momento a otro, decayendo nuevamente como en la adolescencia. Otro factor que también podría afectarme era el hecho de que Sara, la loca ex novia de Dilan reapareciera nuevamente en nuestras vidas para tratar de hacerle daño a nuestro bebé. Dilan me ha asegurado que nada de eso pasaría, Sara lleva más de ocho años desaparecida.

Ahora contamos con veinticuatro años de edad, la misma edad que tenía Hanna cuando se embarazo, pues solo han pasado tres años desde su parto, y ahora yo quede en cinta. Solo espero que los cambios de humor no me peguen tan fuertes como lo hizo con mi cuñada.

—Dijiste que nuestra hija no será así, aunque creo que si llega a ser niña va a ser...

—No lo digas Dandelion. —Inquiere negando.