Parte sin título 64-2

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A Mu Yunyao no le importó: "Señora, antes de usar su imagen como modelo para el bordado, también le pregunté acerca de su temperamento a través de Lady Jin, por lo que este vestido tiene algunos estilos únicos. Debería echarle un vistazo primero. Si crees que hay algo inapropiado, puedo cambiarlo en cualquier momento ".

"Estás bien preparado".

"Si a uno no le importa, ¿cómo se puede ganar plata? La vida no es fácil, a veces se ve bien, pero puede que no sea buena, como yo. Este Niyunfang, que actualmente disfruta del centro de atención, es una famosa tienda de bordados. Si no podemos producir ropa decente, tal vez dentro de unos meses, Niyunfang se desvanecerá en la ciudad de Jingling y se declarará en bancarrota ".

Ding Yuelan se volvió para mirar a Mu Yunyao, la vio enfocándose en la percha para agarrar la ropa, buscó cualquier significado oculto en sus palabras que pareciera inofensivo.

"Señora, ¿le gusta este vestido?"

Ding Yuelan miró el gesto de Mu Yunyao y vio un vestido rojo en la percha. No era el estilo normal que usaban todos ni un vestido de montar formal, obviamente era un cruce entre los dos estilos. (¿Como qipao normal o qipao formal, supongo?)

Todo el vestido era rojo y el calor era como una llama ardiente, que casi podría quemar los ojos de los espectadores. En el escote de la tapeta y en el borde de las mangas había bordados con alambre de oro y mechones de algodón de seda en el costado, haciendo que toda la prenda se viera exquisita y hermosa.


Ding Yuelan se sintió sinceramente atraída por este vestido e involuntariamente se adelantó, pasando los dedos por el collar dorado de algodón de seda, murmurando para sí misma: "¿El algodón de seda no es todo rojo?"

"A todos los demás les encanta bordar algodón de seda en rojo, pero de repente cambié de opinión y lo borde con hilo dorado. El bordado terminado se ve aún más increíble que usar el hilo rojo".

"¿Qué puedo hacer si este algodón de seda dorado no es popular?"

"Ese es naturalmente este algodón de seda dorado que aún no ha encontrado al dueño legítimo".

Ding Yuelan quedó atónito por un segundo, luego se rió entre dientes: "Has hecho un buen trabajo. Me gusta, ayúdame a cambiar".

"Sí, señora."

Mirando a Ding Yuelan, que se había puesto el vestido, Mu Yunyao no pudo evitar suspirar. Efectivamente, algunas mujeres son naturalmente adecuadas para un color tan fuerte: "¡Este vestido, solo tú, mi señora, puedes suprimirlo!" El vestido rojo era el más atractivo. Si se usara bien, sería impresionante y elegante. Si no estaba bien usado, entonces la esencia de toda la persona se ahogará con la ropa. ¡El temperamento de Ding Yuelan es noble e ingobernable, este cuerpo con la ropa roja se vería como envuelto en un resplandor rojo, un resplandor de gloria ardiente y brillante mientras muestra sus ojos brillantes!

Ding Yuelan se miró en el espejo. Las cejas fueron dibujadas cuidadosamente, era un poco más delicado de lo habitual. Los labios se untaron con jugo de rosa roja y los labios rojos se combinaron con un intenso vestido rojo ardiente. Casi no podía reconocerse en el espejo.

"¡Este vestido es realmente hermoso!"

"Si a Lady le gusta, por favor, cuide el negocio de Niyunfang en el futuro. Quiero ver a Lady Tongzhi, bajemos las escaleras".

"...Bueno."

Abajo, Ding Yuexin y Jin Lan susurraron algo, ella era de color suave en cada movimiento, y los ojos de otoño siempre tenían lágrimas, cualquiera que la mirara no podía evitar compadecerse de ella.

Mimada esposa real venenosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora