Día 12

15 1 0
                                    

Caí en la demencia y escribí esto...

Mi estimado amante, te escribo esta carta porque simplemente he llegado a mi límite de aguantar todas estas emociones que mi débil corazón no puede soportar, es tan grande el amor que siento, que puedo hacerte daño sólo para que seas mío, y sé que está mal tener ganas de aniquilar a todas las personas que se acercan a ti, querer hacer desaparecer a todo aquel que ponga una mano en tu glorioso cuerpo que nada más me pertenece, seré la persona más egoísta del mundo pero mis intenciones no son malas, yo te amo más que a mi propia vida, ¿está mal? Bueno...
Como sea, a lo que realmente "vengo"
después de leer esto no me busques aunque dudo que lo hagas, tal vez estás temblando en éste momento, o realmente estás pensando lo peor de mi, por si quieres saber... Ya no te molestaré más, mis sentimientos me mataron, tal vez no entiendas...
Pero cada que me acercaba a ti mi cuerpo era distinto y mi exitación aumentaba por cada parpadeo que dabas, sabía que eso no era normal pero...
Me gustaba, me encantaba tocarme pensando en ti, cada que terminaba el día, unos de mis métodos de masturbación más eficiente era por medio del dolor, el ardor, el masoquismo.
Cortarme una y otra vez hasta desmayarme del placer incondicionalmente que mi ser experimentaba
mi mente en tus ojos
mi razón en tu sonrisa
mi cordura en tus labios
simplemente estaba perdida y nadie podía encontrarme, deseaba con ansías que estuvieras conmigo para siempre
de sólo pensarlo me pone ¡MAL! pero... Sólo quiero tu felicidad y sé que conmigo no lo serías
así que opté por desaparecer por un rato, por una cantidad de tiempo un poco larga, pero eso no significa que no te estaré viendo..
Sólo recuerda que siempre te amaré no importa si ya no tengo cabeza para verte
O corazón para desear tenerte.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 29, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Una suicida más. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora