002.

5.5K 671 587
                                    


A Zayn le encantaba molestar al pequeño gatito Liam. Era una cosita suave y tranquila, contraria totalmente a su comportamiento revoltoso propio de un felino.

Liam hace mucho había notado la entrada de Zayn. Éste se preparaba para atacarle, se inclinaba con sigilo hacia atrás y mecía el rabo junto a su cola. Sus pupilas se habían dilatado llenándose de negro. Liam tenía los ojos medio abiertos para ver al bello angora.

Zayn saltó pero Liam lo esquivó. El angora en medio de la confusión no vio al gatito Liam saltar sobre él. Ambos revoltosos comenzaron a corretearse encima de la cama.

—También me alegra verte, Lii.—maullaba Zayn.

—¿Por qué siempre interrumpes mis siestas?—se quejaba Liam ya estirando las patas y preparándose para dormir nuevamente.

—¡Vamos, Liam! ¡Juega conmigo un poco más!

—Ay ustedes dos.—al cuarto venía entrando un perrito blanco, un poodle específicamente. El siempre mimado y coqueto perrito Niall.— ¿Por qué siempre meten escándalo?

—Es Zayn quien quiere jugar.

—¡Ni, juega conmigo!—Zayn era tan juguetón y revoltoso que no dudaba en lanzarse a Niall, quién negaba y se alejaba de él por jugar muy brusco.

Liam los miraba mientras se hacía el dormido, si Niall se quejaba de un supuesto escándalo cuando ellos jugaban, no sabía cómo llamar a la junta entre Zayn y él. Niall ladraba muy fuerte y Zayn no paraba de ir de allá para acá, y eso no lo iba a dejar dormir tranquilo.

Nuevamente estiró sus patitas y bostezó, mostrando sus colmillos. Una vez se acercó al revoltijo que tenían, no dudó en saltar sobre Zayn y dejarlo quieto mordiéndole la oreja.

—Sólo con Liam sabes controlarte.—Liam le gruñó mientras Zayn comenzaba a asicalar a Liam sobre su cuello.

En ese momento, la puerta de la entrada se abrió y las tres mascotas levantaron sus orejas.

—¡Ni! ¡Dónde estás, mi amor!

—¡Ama! ¡Ama!—Niall comenzó a ladrar fuertemente mientras sus patitas cortas y peludas corrían para bajar la escalera y llegar a seguirle ladrando a su ama.

Zayn y Liam se relajaban mientras Niall seguía ladrando, ambos comenzaron a darse besitos y lamerse el uno al otro.

La ama de Niall comenzó a subir y el angora comenzó a asustarse.

—¡¿Qué haces aquí estúpido gato?!

Oh sí, había un problema con su linda relación. Que a los amos de Liam no les gustaba.











❤️❤️

Patitas Suaves [Ziam]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora