¿Amigos? ¡Nunca! (Jikook) [Adap.]

|°Capítulo 22°|

<Hoseok>

Estaba harto de ser un simple espectador de lo que sucedía con todos. Y sobre todo, estaba cansado de cada día sin Taehyung.

Sabía que había cometido errores con el ojiverde, pero sólo tenía miedo a todo lo que podría pasar, sin embargo ahora podía enmendar los daños, sí es que la suerte estaba de su lado.

Taehyung, como de costumbre, se encontraba sentado junto a Jimin quien observaba discretamente a Jungkook que estaba igual o peor que el morocho en lo que se debe a ser disimulado. Par de idiotas. ¿Acaso no se dan cuenta? Incluso el que a penas conoce sus nombres puede notar que ellos se aman.

Pff, amor joven...

Quizá podría ayudar con ello después, lo principal ahora era Taehyung. Y claramente, como la persona madura y responsable que era, tenía un plan para que todo saliera bien.

No es tan difícil, sólo necesito un gato y una cuerda. Así conseguiría que Taehyung acudiera a ayudar al pobre gato amarrado misteriosamente en contra de su voluntad. Pan comido.

Cuando lo visualizó intentando desatar al felino se acerco rápidamente, porque si esperaba más tiempo tenía por seguro que se iba a arrepentir.

-Tae... -Su voz salió temblorosa e insegura. -T-tanto tiempo

-¿Qué quieres Hoseok?- Le mostró una gélida mirada.

-Sólo quiero hablar

-No hay nada de que hablar, lo sabes. -Su voz era distante, pero Hoseok pudo percibir la pizca de dolor que cargaban sus palabras.

El ojiverde bajo la mirada mientras intentaba deshacer uno de los tantos nudos que había.

-Lo siento ¿vale? ¿Podrías por lo menos escucharme? Pregúntame lo que sea que quieras saber, sabes que te responderé con la verdad.

Taehyung aún con la mirada en el suelo suspiró. Podía irse sin más, pero él quería saber, con la probabilidad de que la verdad no le agrade él necesitaba saberlo.

-¿Por qué me dejaste, Hoseok? Esa es mi única pregunta ¿Yo, n-no era suficiente?

Hoseok sonrió tristemente.

-Tu nunca fuiste suficiente Tae, tu eras más que eso, siempre fuiste más que eso para mí. En ese tiempo me sentía... como ese gato. Estaba atrapado por mis problemas y tu sólo intentabas ayudarme con ellos, buscabas liberarme y lo apreciaba, realmente lo hacía... pero luego llegaban las noches en las que no podía con el pensamiento de que sólo era una carga para ti. Eras y eres tan hermoso y, deslumbrante, yo no podía distraerte con mi caos interno, así que supuse, que tu mundo estaría mejor sin un chico que se la pasaba llorando por cualquier pequeñez -Se encogió de hombros intentando controlar las ganas de abrazarlo. -Entonces... sí, lo siento mucho por herirte cuando me prometí morir antes de hacerlo.

Hizo ademán de irse, pero Taehyung lo detuvo con un abrazo.

-No te vayas, por favor. No quiero ser como Jimin y Jungkook, no quiero sólo poder verte, cuando puedo tenerte ahora en mis brazos.

Sólo pudo sonreír enternecido, colocando sus brazos en la cintura del rizado.

-Hablando de ese par, parece que necesitaran nuestra ayuda.