La venganza de una vampiresa.

Promesa

Una vampiresa, sí eso soy, esa raza llamado humanos siempre anda en busca de la cazeria de alguno de los miembros de mi raza, sólo para demostrar nuestra existencia, Jaja, que raro, ¿Como buscan nuestra existencia? Si saben que existimos, por algo nos buscan, ¿no?

Hace unos novecientos años, mi raza cambio totalmente, el rey de los vampiros, Drecon, fue engañado y seducido por una humana. Todo sucedió cuando los vampiros tenían ciertos encuentros con los humanos. Según cuentan ella lo seducio, lo volvió loco de amor, y ella al final lo asesinó. Cuando su cuerpo tenía la estaca en el corazón, prosiguió a quemarlo y guardar sus cenizas en algún lugar que hasta el siglo de hoy, nadie sabe donde están.

Desde ese día ya la raza humana no nos teme, le tememos nosotros a ellos.

Recuerdo que el día en que mi madre me contó dicha historia prometí vengar la muerte de Drecon, y así demostrarle a los humanos quienes son los reyes del miedo. Ellos no lo son, lo somos nosotros, pero hemos perdido el respeto. Ya nadie le teme a un vampiro, pues creen que ya no existimos.

Algún día me vengaré de un humano. Eso lo prometo.