En un día cualquiera

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Como era de costumbre para el pelirrojo, cerca de las 10 de la noche se disponía a terminar los últimos detalles de la cena de ambos.

—Eso huele bien—
Comentó  He Tian acercándose a la cocina dándole una mirada al caldo el cual de a poco comenzaba a hervir en la olla la cual destapaba curioso.

—Si sigues haciendo eso voy a darte una paliza— pronuncio amenazante el colorado sintiendo la mano descarada de He Tian acariciando su trasero como si nada mientras aún mostraba interés en lo que sería la cena de esa noche.

—No sé de qué estás hablando,
¿te refieres a la comida?—
Cuestionó tapando una vez más la olla haciéndose el tonto.

—Parece que de verdad quieres quedarte sin cenar esta noche, ¿acaso no tienes nada mejor que hacer?—
Dijo irritado y cansado del acoso nocturno dejando a un lado el cuchillo y aquellas zanahorias las cuales rebanaba para el caldo.

—No hay nada más que quiera hacer que estar junto a ti—
Dijo sonriente haciendo sonrojar ligeramente al más bajo el cual de inmediato dirigió un puñetazo a la cara del pelinegro el cual con grandes reflejos lo detuvo tomando su muñeca.

—¿Acaso te apena lo que dije?—
Sonreía divertido jalando al pelirrojo rodeando su cintura con su mano libre quedando así sus cuerpos pegados de la pelvis al pecho.

—¡¿QUIEN ESTÁ APENADO!??
¡Y YA DEJA DE MOLESTAR DE UNA VEZ MALDITO CARA DE PERRO!—
Se quejó gritando nervioso buscando despegarse del pesado de He Tian.

—Aunque... ahora que lo mencionas sí hay algo aparte de verte cocinar que quiero hacer y con muchas ganas...—
Diciendo esto en un tono suave acercó sus labios a la boca ajena alertando al más bajo de lo que pretendía hacer.
Logrando Mo detenerlo justo a tiempo con su mano bloqueando sus labios.

—Si sigues jodiendo no tendrás ni eso ni lo otro— Amenazo el colorado.
—Ya vamos a cenar, en vez de apoyarme como un perro en celo por qué no haces algo útil y preparas la mesa?—
Apartó la mano de la boca del mayor así liberándose del más alto por voluntad de éste el cual lejos de enojarse por aquella actitud de su pareja más bien sonrió de lado más lujurioso que antes.

–Como ordene su majestad—
Dijo bromista ahora dejando finalmente en paz a Mo sacando de la alacena platos y cubiertos los cuales acomodó en la mesa para minutos después de aquello terminar servido todo comiendo ambos uno al lado del otro.

—¿No sería romántico si me dieras de comer  en la boca?— comentaba el pelinegro abriéndola y mostrando su lengua claramente insinuante ante su pareja el cual volteó a verlo a los ojos un momento.

—¿No sería mejor guardar silencio y simplemente comer?—
Contestó para amagar una cucharada de su sopa a la boca del pelinegro para terminar tragándola él mismo.

—Tan serio como siempre—
Comentó en voz baja con aquella sonrisa seductora dibujada.
—Que digas eso sólo me hace desearte más—
Susurró en su oreja soplando esta suavemente al final.

—Imbecil...—
Susurró el colorado ahora más sonrojado intentado concentrarse en su plato para terminar de comer al igual que He Tian luego de un rato.

(...)

—Yo cociné, tú lavas—
Mencionó Mo levantándose y dejándole los platos sucios sobre la mesa para que al menos aquel idiota ayudara en la casa.
He Tian al ver cómo su pareja se alejaba no pudo evitar resistir el levantarse también y tomarlo por detrás abrazándolo con fuerza.

19 Days: Amor AdultoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora