Maravilloso
Al día siguiente Engel había despertado en la cama de su ahora novio, no tuvieron relaciones, solo durmieron juntos.
Liv había despertado antes que Melendez, le dió un beso en los labios y fue a preparar el desayuno.
Hizo unos ricos pancakes endulzados con miel y frutas alrededor. Luego de eso fue de nuevo a la habitación de Melendez, él seguía dormido, ya era muy tarde para ir a su trabajo.
Se acercó a él y lo despertó cuidadosamente.
— Oye... Neil, cariño... Despierta... —dijo a su oído y el lentamente abrió los ojos.
— Mmhh buenos días princesa —saludo Melendez mientras se levantaba.
— Buenos días cariño —respondio Liv— ¿Dormiste bien?.
— Si... ¿Qué hora es? —pregunto Neil.
— Cómo las 10:30...
Melendez se sorprendió por la respuesta, rápidamente busco su ropa en el armario.
— Voy muy tarde al hospital —comento mientras se vestía.
— ¿Es muy importante que vallas hoy? —pregunto la mujer.
— Pues no tengo ninguna cirugía programada, solo revisar diagnósticos...
— Entonces no vallas... —pidio Olivia.
Melendez la miró a los ojos, vio que ella quería pasar tiempo con el.
— ... Esta bien amor —dijo Melendez y se quedó en pijama.
— ¡Si! ¡Te voy a preparar un desayuno completo! —comento Olivia muy entusiasmada.
Luego brinco a sus brazos mientras lo besaba dulcemente.
La mañana paso muy rápido para ellos, primero fueron a desayunar mientras platicaban, luego de eso fueron a arreglarse, estuvieron jugando Jenga.
La tarde se la pasaron platicando sin aburrirse.
— Por cierto, ¿Cuántos años tienes? —le preguntó Liv a Melendez.
— ¿De cuántos me veo?
— De 65 mi amor —respondio Olivia sarcástica.
— Muy graciosa cariño...
— Bueno yo te cálculo como unos 38 o 37.
— Casi... Tengo 39 añitos...—dijo Melendez— ¿Y tú preciosa?
— ¿De cuántos me ves?
— De 12 años por tus pucheros
— Ño, tengo 29 —respondio Olivia.
— Te vez aún más joven y creeme que son bastante años de diferencia —comento Melendez.
— Lo dices como si fuera menor de edad —bromeo Liv.
— ¿No te molesta que ya esté viejo? —pregunto Melendez abrazándola.
— Viejo mi abuelo, ni que estuvieras chimuelo —respondio Liv— a mí no me molesta.
Ambos se abrazaron mientras veían por la ventana a los niños jugar.
— ¿Tienes hijos? —pregunto Liv.
— No... —despues de esa pregunta Melendez recordó su pasado con Jessica.
— ¿Y... Te gust—Olivia ahora fue interrumpida por los labios de Melendez.
Fue un beso dulce y cariñoso, la abrazaba mientras ella acariciaba su mejilla.
Justo cuando el beso aumentaba de tono sonó el teléfono de Melendez.
— Mi amor debes contestar... —dijo Liv interrumpiendo el beso.
— Mmm okey...
Tomo su teléfono y contestó.
— Habla Melendez —dijo mientras se sentaba.
Mientras Neil hablaba Olivia decidió masajear sus hombros mientras daba ligeros besos.
— ¿Un nuevo tumor? —pregunto el cirujano confundido mientras disfrutaba los besos de Olivia— ¿Es difícil de extraer?.
— No es un lugar seguro y expuesto doctor —se escuchó a través del teléfono.
— Entonces extraiganlo, dudo que necesiten de mi supervisión —contesto Neil.
— ¿Seguro que no quieres ir cariño? Pregunto en voz baja Olivia.
Melendez negó con la cabeza y luego beso sus manos. Luego colgó.
— Nada muy serio, pero Lim se puede encargar —dijo Neil.
— Que bueno —respondio Liv.
— Tienes unas manos tan suaves...
— ¿Quieres que siga con el masaje?... —pregunto Engel.
— Porfavor... Pero primero... —Melendez la besó.
Ella siguió el beso y se puso cómoda entre sus piernas, ella acariciaba su pelo mientras el su espalda. Y entonces sonó el teléfono de Olivia.
— Adivina quién es... ¡Tú suegro!
— Oh Dios... —expreso Neil.
Olivia contesto y esbozo una sonrisa.
— Hola pa ¿Cómo están? —dijo Liv.
— ¡Hija! ¡Tú hermano me mostró una foto del periódico! ¡¿Desde cuándo estás casada?! —exclamo el padre de Liv estupefacto por la noticia.
— No pa... El restaurante lo malinterpreto todo...
— ¡¿Quién es el?! ¡¿Un mafioso?! —pregunto su padre y Melendez lo pudo escuchar— ¡¡Por Dios mi hija está casada con un narco!!.
— ¡¡Papá...!! ¡No exageres!
— ¡¿Hija cuando pensabas decirnos?! ¡¿Cuando fueras cantante de corridos?!
— ¡¡Papá!! ¡¡Es cirujano!!
— ¡¡Mujer nuestra hija está saliendo con un cirujano clandestino!!
— ¡¡Santo cielo papá!! ¡¡Trabaja en un hospital!!
— ¡¡Eso lo hubieras dicho!!
— ¡¡Eres un dramático!!
— ¡¡NO SOY DRAMÁTICO!!
— Ay... Papá, deja veo cuando se los puedo presentar... Cariño...
— El domingo mi cielo, sin falta vamos a San Diego...
— ¡¿El está contigo?!
— Si pa... El domingo vamos, salúdame a mamá, los amo... —luego de eso colgó Olivia.
— Se ve que tú padre se preocupa mucho por ti... —comento Melendez— ¿Crees que le agrade?
— ¿Fumas? —pregunto Liv.
— Para nada...
— Bienvenido a la familia mi amor —dijo Olivia y lo besó.
