ONCE (II)

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—Deberíamos subir... antes de que mi papá... nos vea aquí— Joel sonrió mientras hablaba en la mitad de muchos besitos. Chris lo forzó a que se recostara y se acomodó sobre el menor, conectando nuevamente sus labios. No estaba a favor de que Joel use sus labios para otra cosa que no sea besarlo en ese momento, pero Joel quería decir lo que pensaba cuando se separó de él —Ya son más de las Diez y tiende a llegar más temprano los viernes...mmm bebé...

—Si subimos, no lo vamos a poder oír cuando llegue— Chris succiono el labio inferior del menor haciendo que este soltara un pequeño gemido —Y no queremos que suba y que encuentre mi cabeza en la mitad de tus piernas ¿o si?

Joel suspiró por la pregunta, sonriendo cuando la lengua de Chris pasó por su cuello —Obvio no.

Chris sonrió encima de su piel —Exactamente— comenzó a dejar pequeños besos sobre su cuello hasta que Joel puso sus manos el rededor de su torso, metiendo su manos por debajo de su camisa —Eso se siente rico.

Uno de sus celulares vibró, pero ambos lo ignoraron. El mayor se acomodó entre las piernas del rizado y enterró la cara en su cuello mientras ambos rozaban sus miembros. El celular vibro de nuevo y Chris se dio cuenta de que probablemente era una llamada, aunque poco le importó.

—Puede que sea Diego— Joel susurró, Chris embistió hacia adelante de nuevo haciendo que su novio gimiera a todo volumen —Ay dios.

—Quien sea que sea, puede esperar— le dijo Chris. Al separarse, miró a Joel a los ojos y dio otra embestida, admirando la manera que él menor abría su boca —Prefiero verte así.

—Bésame— pidió Joel.

Chris no perdió tiempo en cumplir su deseo. De hecho, susurró un pequeño —Con gusto— por encima de su boca antes de atacarla sin piedad. Joel soltó un suspiro y pasó sus manos por toda parte del cuerpo de Chris que alcanzaba a tocar. Cuando sus manos llegaron a los bóxers de Chris, Joel se dio cuenta que la manera en que había apretado su trasero había calentado más al mayor.

Era información que le serviría más adelante y eso lo excitaba.

Chris recostó su frente encima de la de Joel y embistió unas cuantas veces más con más fuerza. Adoraba la manera que Joel lo estaba tocando. Nunca nadie lo había tocado de esa manera antes y Chris le encantaba eso. Suspiró, lamiendo sus labios al escuchar lo que salía de la boca de su novio y frunció el ceño cuando el menor retiró sus manos.

Porque enserio, eso se sentía increíble.

Joel intentó no desesperarse al clavar sus uñas por encima de la camisa de Chris. Comenzó a mover sus caderas a la par de Chris y dejó salir un gemido al sentir la casi erección de su novio. Tenían demasiada ropa puesta.

Eso continuó por un largo rato. Los besos, los sonidos, el restregarse entre sí. Chris se dio cuenta que quería que las manos de Joel volvieran a donde estaban hace un rato. Por más increíble que le parecía la idea de tener todo su cuerpo lleno de rasguños de Joel, quería que sus manos volvieran debajo de sus bóxers como hace unos minutos. Así que se inclinó hacia el menor para pedírselo y parando sus movimientos por unos segundos. Joel suspiró, no tan satisfecho por que parara. Todo antes de que la puerta principal se cerrara. Chris con las justas pudo soltar un 'tócame' antes pegar un salto y coger una almohada, sentándose en una esquina del sillón y cubriendo su regazo con dicha almohada. Joel también se apuró en sentarse, sorprendido por el ruido y se encontró a nada más y nada menos que a su padre parado en la entrada. El hombre dejó su maleta al lado de la puerta y miró con enojo a su hijo, después el novio de su hijo.

RIDE - Virgato ||Adaptada||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora