Mi secreto (Shumdario)

¿Accidente?

Llegamos a un cuarto, se podía observar desde la ventana que tenía este y cuando mire a Harry en aquella cama dormido, con un yeso en su pierna, un cabestrillo en su brazo y algunas heridas en su rostro, mi corazón se rompía. Dominic me miró y me tomó de los hombros.

-Todo estará bien, él está bien.- mencionó el rubio pero una lágrima mía descendió por mi mejilla.

La recepcionista/enfermera nos dejó y Kath me miró también, ella mostraba dolor en la mirada.

-Es tan hipócrita que hagas esto.- susurro la chica.

-¿De qué hablas?- musite confundido y ella rió irónicamente, esa risa en ella se comenzaba a volver muy común en nuestras platicas.

-Tú lo llevaste al abismo y literalmente lo empujaste en él, no vengas ahora a llorarle cuando el te ha llorado por meses y te ha importado una mierda.- gruñó la chica completamente enojada mientras brotaban suaves lágrimas de sus ojos.

Me había cegado tanto en mi y mi nueva vida "perfecta" que había olvidado a Harry, me había olvidado de lo que había pasado entre nosotros, en todo lo que tenía que ver con ambos. Kath tenía razón, yo estaba siendo hipócrita.

Dominic me miró y negó con la cabeza.

-No te vayas, él te va a querer aquí cuando despierte, no le des más razones, todos sabemos que él te sigue importando... simplemente tomaste una decisión que no lo incluía a él, pero puedes apoyarlo, no lo dejes.- me dijo el rubio sincero y luego miro a Kath.

-Katherine, tú más que nadie sabe que el amor de Harry hacia Matt nunca se ha ido, Harry apreciará mucho que él haya venido.- musito y Kath me miró asintiendo.

Entramos a la habitación y Kath se sentó en la silla por un lado de la cama donde estaba Harry, ella susurraba cosas y sus lágrimas eran más y más.

Yo me acerque y tomé su mano libre, la que no tenía un cabestrillo, y entrelace mis dedos con los suyos.

-Llamare a Cassandra para contarle que encontramos a Harry...y todo esto.- mencionó el rubio saliendo de la habitación.

Sentí como mi mano era apretada y mis ojos se dirigieron a su rostro. Harry comenzaba a despertarse.

Abrió sus ojos lentamente mientras se acostumbraba a la luz, me miró, formó una sonrisa de lado y miró nuestras manos unidas.

-¿Matthew? ¿De verdad eres tú?- mencionó con su voz más grave de lo usual y Kath se abalanzó a él.

-¡Maldito! Me asustaste tanto...- la chica se soltó y sus sollozos eran fuertes, Harry soltó mi mano para tratar de abrazar a la chica.

-Lo siento galletita.- musitó y la pelirroja se separó de él mientras secaba sus propias lágrimas.

Harry volvió su vista hacia mí y me examinó.

-¿Por qué estás aquí?- susurro y yo mordí mi labio.

-Porque...-

-Porque se sintió mal por ti.- murmuró Kath con sarcasmo y rodee los ojos.

-Katherine y Dominic se preocuparon por no saber dónde estabas. Yo los acompañé.- murmuré y Harry bajo su mirada hacia su yeso en el pie.

-Ya veo...- musitó suave.

-Necesito decirte algo.- mencioné y Kath rió irónica.

-Callate, ya déjalo, ¿No lo entiendes? Si no quieres una vida a su lado, déjalo.- gruñó y Harry miró a Kath.

-Katherine, basta.- mencionó el chico con molestia.

Dominic entró a la habitación y vió la situación.