Eres mi pecado (COMPLETA)

Voy a serte sincera

Definitivamente estar en este colegio es un fastidio. ya sono el timbre hace unos cuantos minutos, pensaba quedarme fuera pero me aburrí así que decidí entrar al salón .

- Señorita que clase de modales son estos, para llegar a esta hora.-me dijo un profesor molesto.

- modales? Que es eso?.-dije fingiendo no saber, los demás estudiantes reían y otros murmuraban.

-salga de mi clase ahora mismo!.-gritó

-pero si ni siquiera he entrado. - dije sonriendo.

- Salga!!.-grito nuevamente.

- con gusto.-cerré la puerta y salí despreocupada.

Maldita falda, maldito papa, maldita mi madre por dejarme con el, odio esto.

Sonó nuevamente el timbre, y de un momento a otro el pasillo estaba lleno de chicos y chicas nerds, en cerio aquí todo era asi?

- Sabes que comportarte como una chica mala te afectará en el período de clases?.-dijo alguien detrás de mi.

- Sabes que me vale mierda el puto período?.-respondi irritada.

- Que te he hecho yo para no agradarte? .-pregunto este.

- Simple, acercarte a mi, no te he pedido ayuda idiota.-le respondi, ya sabia que era el chico de esta mañana.

Sólo sentí que se alejo, me relaje y salí del colegio traumante para monjas. Llevaba ropa en mi mochila así que entre a un baño público y me cambie. Llevaba una camiseta larga y holgada color blanca, y unas leggins negras rasgadas, con mis converse viejos grises, me solté el pelo ondulado y me maquille un poco de un tono oscuro, salí de allí, fui a la estación de trenes y espere a por uno. Entonces vi a máx comprando un boleto de tren, me acerque a el furiosa.

- A caso me estas siguiendo estupido? .-le grite mal humorada.

- vaya eres tu?!... y no linda no eres tan importante. -me dijo con esa voz despreocupada.

Sonreí fingidamente y me di la vuelta.

- Que carácter que tienes!, no me haz dicho tu nombre. -dijo con interés.

-Y que te hace pensar que te lo diré?

- bueno es que si no te diré extraña, y ese nombre no es muy lindo que digamos.-dijo

- victo..-me corte..-vicky.-respondi conforme.

- vale, victoria a donde vas?.-me dijo.

- seattle. - dije molesta por llamarme victoria.

-ah yo igual.

-Que mala suerte...

- ya, porque estas en greenwich sino tienes nuestra creencias.

- porque mi padre quiere eso, créeme yo jamás hubiese entrado allí.

-eso lo doy por seguro.-dijo el.

- vale, bueno me voy, ojalá y no me encuentre más contigo..

- dios te cuide.-dijo despidiéndose

Que?!! Llegue a seattle y me encontré enseguida con tamy, la abrace, le conté todo y me despedí. Iba caminando hasta la estación de trenes, y me di cuenta de que estaba en ese lugar, el mismo de hace dos años, que habrá pasado con Christian? La verdad me dio curiosidad pero lo seguí detestando por lo que me hizo. Seguí caminando hacia delante, hasta que llegue a la estación y para mi mala suerte ya no había ningún tren hasta las 4 de la mañana. Me recoste de una columna de la estación y suspire fustrada.

- te quedas?.-pregunto el.

- oh dios por favor alejalo de mi, que fastidio. - dije

- creo que el señor no escucha esa tipo de súplicas, vamos yo tengo un taxi.-dijo

- no gracias, estoy bien aquí.

-Sí claro, si quieres que te violen.

- oh pensándolo así, llévame. - pedí

El sonrió de mala gana, subimos al taxi nos quedaban 55 kilómetros, no se cuando me quede de dormida pero cuando desperté estaba apoyada de máx, levante la cabeza de mala gana y me enderezo.

- llegamos.-dijo el.

Yo salí del taxi y estalle la puerta.

- ni un gracias? .-pregunto.

- te voy a ser sincera... Jodete.-grité muy cerca de su rostro.

Gracias por leer mi nuevo capítulo...hasta otra.

Besotes.