Los Poemas de Willy

Primer amor

En qué momento de nuestras vidas hemos coincidido,
Admito que tú me encontraste, justo en el momento que estaba perdido,

Sin poder atender, o corresponder a la razón,
Pues hace tiempo arroje al vació la llave de mi corazón.

Como atender a todo esto que me haces sentir,
Siendo que por culpa de querer mejorar a otros yo me tuve que destruir,
Debo confesarte que siempre odie en las relaciones el orgullo,
Pero como hablarte de relaciones, si de amor se trata yo soy el primero tuyo.

Intuyo, que esto es amor verdadero,
Pues soy suyo, cuando se trata de amar con esmero,
Primero, quiero recordarte, el beso que nos dimos en mi cama,
Y atesorar el momento que sentí tu perfume en mi almohada.

Segundo los segundos de pérdidas miradas,
Clavadas en los ojos de la tristeza como dagas,
Lo tercero es el respeto, que tengo a tu misericordia,
Lo cuarto es la promesa, de no haber terceros en discordia.

Cinco son los sentidos que revolucionas en mi ser,
6 días a la semana, te deseo ver,
Pues el séptimo decido extrañarte,
Para fuerte creerme ser.

La musa que inspira a este poema,
Es la sombra de la perfección en la cueva de Platón,
Pues si se trata de lo que siento,
Lo nuestro rosa algo superior.

Qué locura puedo expresarte, cuando me contaste de tu virginidad,
Que quisiste sellar lo nuestro, con este acto de amor de verdad,
Pero que mágico escuchar, cuando dices que conmigo no la perdiste,
Sino que por todo lo que sentiste, lejos de perderla, me la diste.

Que mal me siento hasta este día,
Y tengo miedo de no poder expresarlo, con esta poesía,
Porque a pesar de todo lo que me diste sigo desconfiado,
Por dudar de que mentiras sean las que me hayas contado.

No es culpa tuya, sino mía por no perdonar,
Porque en su momento no pude, a lo que me hacía daño frenar,
Y ahora por no saber cómo diferenciar,
Es tu corazoncito el que tengo miedo de lastimar.

Pero el esfuerzo no puede faltar, me estoy esforzando,
Hacer el amor, es lo que más, no está gustando,
Tú me haces sentir libre, cuando de tus brazos estoy preso,
Cuando amarramos nuestros cuerpos y cerramos la celda con un beso.

Quiero ser tu desayuno en la mañana,
Ese jugo de naranja, mientras en la ventana ves el alba,
Aquel que produzca sonrisa al susurrarte rimas,
En los instantes antes de dormir al caer el día.

Quiero agradecerte, lo hermoso de tu actitud,
Recordando que para ser pareja, me lo pediste tu,
Ahora quiero adelantarme, y obviando que en el futuro nos amemos,
Voy a ser yo el que te mire a los ojos, para pedirte que nos casemos.  

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