¿Raros jovenes con complejos de dioses?,más, ¿ninjas?, más, ¿Dioses como espectadores?, más, ¿humor?, más, ¿emoción?, más, ¿Locuras y desmadres?
-¡Luz, camara, y acción! ¡Que comience el Show mis queridos dioses!
🍲•Los personajes del anime le perte...
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Unos azabaches, caminaron por unos grandes y largos pasillos de color blanco, ambos se encontraban nerviosos, y caminaban hacia una gran puerta de Oro puro.
La amaba el oro, bueno, en realidad amaba todo lo que tuviera que ver con dinero, por lo que la dejo embelesada por unos segundos, para lugo darse una cachetada menta, debía concentrarse y seguir con su infantil discusión con un azabache a su lado, él cual se encontraba molesto.
—¡Todo de seguro fue tu culpa maldita sea!, ¡Quizá nos quiten nuestros poderes y terminen con nuestras insignificantes vidas de una vez por todas! -Una azababeche con ojos rubi y una piel palida apunto acusadoramente al joven a su lado, él cual la miro ofendido.
—¿Pardon? -pregunto el azabache con un asento Francés-¡Sino mal recuerdo eres tu quien se mete con lineas alternativas y de pone jugar con ellas como si fueran unos benditos videojuegos del demonio! -Con enojo, él azabache le respondió a la chica, la cual lo miro furiosa.
—¡Hay por favor!, ¡como si tu no lo hicieras!, ¡Al menos yo cumplo mi trabajo en la sección de almas y reencarnación! -La azabache mientras subía y bajaba sus puños en forma de enojo.
—¡Pero luego de jugar con ellas y engañarlas!, ¡yo por lo menos soy amable y trato de hacer bien mis papeles en los mundos alternativos en los cuales nos mandan!
—¡¿Estas insinuando que yo no lo hago?!
—No se, ¡Pero también te encargas de hacer un desastre o llevar por el mal camino al protagonista de esa realidad!
—¿Asi? ¡Ni que fueras un puto santo maldito!
—¡Al menos yo no secuestro a personajes de otros mundos!
—¡Solo fueron dos veces!, Además, ¡Siempre sacas ese punto en nuestras discusiones!
-¡Ni que dos veces fueran poco cuando se trata de un secuestro! ¡Y como no sacarlo si fueron una de las cosas más ridículas que has hecho!
—¡¿Ridicula?!
—¡Si coño!
Ambos azabaches comenzaron a Jalonearse el cabello de manera brusca, mientras que se lanzaban maldiciones y miradas asesinas.
