Hijo Del Dragón | #2

C > 28

Me despierto con la respiración agitada, mi cabello pegado a mi frente por el sudor. Los rayos del sol se filtran por la ventana. Paso mis manos desesperado por mi cabello.

¿Que fue eso?

¿Un sueño? ¿Una pesadilla?

Eso ahora no importa. Lo que importa es que faltan tres días para la coronación y aun falta probarnos los trajes.

La puerta es tocada repetidamente y una voz femenina, molesta y desconocida para mis oídos se escucha al otro lado.

-Joven Morgan, su madre le espera en el salón.- dice la chica.

A que hora llego la servidumbre? Por el olor es una humana. Es mejor así, ya que si ve algo indebido... no hay problemas en matarla, ni a ella ni a otros humanos.

Tome mi celular que reposaba para ver la hora y me encontré con varios mensajes de Jenny.

MolestaTeñida:

¿Donde estas?
                    -8:30 am

¿Porque tu casa no tiene muebles?
                    -8:32 am

BENJAMIN!
                    -8:33 am

Mire la hora finalmente, son las diez y media de la mañana. Me rehuse a responder los mensajes que me envió Jenny. Últimamente se ha vuelto muy molesta y ha estado ignorando a mi Tío Killiám... como si su pareja no existiera.

Arrastrada...

Me levante con pereza y camine al baño. Mi cabello revuelto y ojeras marcadas... quizás no me he alimentado con frecuencia ultimamente. Lave mi rostro, medio acomode mi cabello para regresar a mi habitacion.

Amplia de paredes grises oscuras, una cama matrimonial con sabanas de un azul muy oscuro casi negro. Luces empotradas en el techo. Un escritorio de madera oscura, un espejo de cuerpo completo. Un librero sofisticado y un sillón de terciopelo gris. El armario estaba en la pared, la puerta del baño a un costado y la salida en toda la esquina de la habitación.

Abrí el armario y saque un pantalón deportivo gris y una camiseta negra. Opte por dejar mi telefono y sali de mi habitacion.

La habitacion de mi hermana queda a mi izquierda... en la esquina del pasillo, Tío Killiám duerme a mi derecha... quedando en el medio, pero entre puerta y puerta hay varios metros de separación y las paredes son insonorizadas así que tenemos privacidad. En el piso de arriba estan las habitaciones de nuestros padre y las de Jano.

Cada habitación tiene baño propio. Donde habitamos la realeza están en la Ala Norte, y la de los invitados en la Ala Sur... aun me pierdo en este lugar... pero apenas llevamos un día. Baje las escaleras de caracol con sueño.

Despues de una caminata no muy larga llegue al salon. Mi madre solo llevaba una camisa de mi padre y pantalones cortos... intento no reírme al ver las marcas purpura de su cuello, las cuales intenta ocultar con su cabello... y mi padre no se queda atrás. Cabello rebelde, labios hinchados, un pantalon suelto negro y camiseta del mismo color.

-De que te ríes.- parece que no lo resistí. Papa me observa fulminante.

-N-nada, solo que deberían disimular mejor su salvaje noche.- me reía mucho y papa solo bufaba molesto.

Algo se recostó en mi espalda media y unos brazos me apresaron en el abdomen.

-Que ocurre?.- le pregunte a mi adormilada hermana.

-L-la mucama me despertó...- se queja.- La amenaze y creo que la traume.

Los tres presentes nos reímos. Y una sirvienta aparece cabizbaja.