¿Enamorada de mi hermano?

CAPITULO 49: CITA

NARRA DYLAN

Ya han pasado algunos días después de que Dani me propuso matrimonio

Nuestra casa es un caos, después de regresar de la casa de playa. Mis padres biológicos llegaron, no tardo mucho cuando mi mama, nath y melisa se pusieron a bombardearme con preguntas acerca de que vestido, que colores quería para el local y todo ese tipo de decoraciones de bodas

Por mi parte decidí negarme a todo e irme directo a mi habitación, justo como estoy en este momento

Yo: ya te dijo mi madre de la fecha de la boda – le pregunto al ver a Dani entrar, niega

Da: no pero no creo que tarde demasiado, hablando de eso – suelto un suspiro de fastidio mientras me tapo la cara con una cobija – quiero hacer las cosas bien, por lo tanto quiero que nos mudemos, no ahora ni mañana, quiero que compremos una casa para nosotros dos – me destapo la cara

Yo: es muy lindo de tu parte decirme eso, pero bobito yo no planeaba quedarme a vivir con mis hermanos para siempre cariño – se acuesta a mi lado

Da: ¿entonces que se supone que sigue ahora? – me enojo de hombros

Yo: supongo que sexo se celebración, y después podemos pensar en las cosas estresantes, como cuanto queremos pagar por la casa, por la boda, y la fecha, aunque lo de la boda y la fecha se lo podríamos dejar a mi familia, sabes que le gustan esas cosas – sonríe

Da: me parece una idea genial – se pone sobre mi apoyando en sus brazos su peso – podemos hacer la parte del sexo de celebración entonces - me besa

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NARRA ANTHONY

Mentiría si dijera que no estaba nervioso, el ver a Daniel hacerlo me dio el valor, ya eran muchos años que llevábamos juntos

Le había pedido a sebas vernos en un parque, a él le encantan los picnics así que el primer lugar al que lo llevaría seria ahí, le pedí prestado el coche a Daniel

Mientras lo esperaba sentado en la banca moría de nervios, jugaba con el celular para mantener mis manos ocupadas

Sebas: hola cariño – me abraza y me da un beso en la mejilla

Yo: hola, te ves hermoso – le doy un beso

Sebas: sabes que no te comprare el videojuego hasta que pases calculo ¿verdad? – me rio

Yo: no soy interesado – le digo ofendido – mejor vamos nuestra cita nos espera

Sebas: oh vaya, no vine arreglado para la ocasión – dice nervioso - dime que no es algo que se tenga que ir elegante, porque correré a la casa a cambiarme –lo abrazo por la espalda

Yo: relájate cariño, vas perfecto –le muerdo el lóbulo de la oreja –estas encantador como siempre -le dejo un beso en la mejilla y me separo de él – vamos – lo jalo de la mano hacia el coche

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Sebas: ¿hiciste esto tú? – dice mientras ve la manta y la comida sobre ella

Yo: recibí algo de ayuda – me rasco la nuca – sé que te gustan y nunca habíamos en la nuestra ciudad, así que te prepare esta sorpresa – se me acerca, pasa sus brazos alrededor de mi cuello, mis manos se posan en su cintura

Sebas: es perfecto – me besa

Yo: entonces a disfrutar - nos sentamos en la manta. Había comprado su comida favorita y su nuevo vicio, fruta con chile – algún día te enfermaras del estómago por tanto picante que comes – agarra una barita de jícama y la remoja en el chamoy para después rociarle Tajín