Extra I

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Finalmente Jungkook no pudo contenerlo.

— ¿Po-por qué tienes que usar ese short? ¿No puedes, no sé, usar un pantalón o algo así? — dijo mordiendo su uña.

JiMin lo miro a través del espejo con las cejas alzadas y cuando Jungkook no retiro las palabras, dio media vuelta poniendo sus mano en sus caderas y dejando escapar un pesado suspiro.

—Dime que no estás hablando en serio. — Jungkook en cambio lo miro preocupado, sin dejar de morderse las uñas.

—Es sólo que... es muy corto. — Él se veía realmente consternado.

JiMin miro sus piernas, el short le llegaba a medio muslo, no era ni de cerca tan corto como podría serlo, ni de cerca tan corto como otros que tenía en la maleta.

—Jungkook, cariño, bebé. — Dijo con la sonrisa más pasivo-agresiva que pudo encontrar. — Estamos a casi treinta y cinco grados centígrados, con un porcentaje de humedad como de setenta por ciento, salgo sudando de la ducha ¿y tú quieres que me ponga un pantalón? — obviamente JiMin esperaba que Jungkook se retractara, pero a veces como que Jungkook no funcionaba.

—Y otra camisa, esa que tienes puesta es muy uh transparente.

JiMin entonces no pudo evitar reír.

—Cariño, no voy a cambiarme, estamos en la playa, todo el mundo viste así, además el hecho de que ahora estemos casados no quiere decir que me puedas decir que puedo o no ponerme. — Y contrario a la reacción que esperaba, Jungkook sólo dejó caer los hombros e hizo un puchero.

—Pero tú eres precioso y todos te van a ver y te van a querer y yo me voy a poner celoso, mejor hay que regresar a casa, allá siempre estabas totalmente cubierto. — Eso sólo ocasionó que JiMin volviera a reír y se acercara hasta poner sus manos sobre los hombros de Jungkook.

—Realmente te adoro. — Dejo un beso sobre sus labios. — Pero eso no quita que estés actuando como un tonto, yo sólo te quiero a ti y eso es todo lo que importa, cariño, así que deja esos celos ridículos y vámonos, que me muero por entrar en ese cálido mar.

Y aguantándose las protestas, Jungkook fue detrás de él, mirando mal a todos los alfas y siempre con un brazo alrededor de la cintura del omega.

🌼

Tenían ya una semana en la playa cuando el bloqueador solar se terminó y Jungkook, que no quería que su omega se quemará la piel, los arrastró hasta el Walmart más cercano.

— ¡Oh! ¡Mira esa preciosura! — Exclamó JiMin emocionado soltándose del agarre de Jungkook y casi trotando hasta un pequeño vestido floreado en el área de ropa de bebés.

—Pero Eunbi es demasiado grande para que le quede, amor. — Dijo Jungkook a sus espaldas, haciéndolo morderse una sonrisa.

No estaba embarazado, pero definitivamente quería tener, como mínimo, otro bebé.

Él comenzaba a tener esa pequeña esperanza de tener esa numerosa familia con la que había soñado cuando era apenas un niño y sabía que si la quería tenía que darse prisa, porque su reloj biológico definitivamente no lo esperaría, pero él y Jungkook aún no hablaban de eso, y tampoco quería apresurarse, quería disfrutar de su pequeña familia por un tiempo.

—Lo sé... — Dijo de cualquier manera, con añoranza mientras levantaba el vestidito y lo acariciaba con sus dedos.

—JiMin, es muy bonito y todo, pero el ferry sale en veinticinco minutos, amor, tenemos un poco de prisa.

—Lo sé, lo sé. — Dio media vuelta para enfrentarse a Jungkook sin soltar el vestidito. — ¿Por qué no vas por el bloqueador mientras yo escojo algo para nuestra hija?

Dicha 블리스 "Kookmin"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora