Dicha 블리스 "Kookmin"

11

Fue un sonoro bostezo lo que despertó a JiMin.

Se sentía incómodo, cansado y adolorido.

Y el intermitente pitido a su derecha comenzaba a molestarlo.

¿Un pitido? racionalizo abriendo los ojos y encontrándose en una habitación en penumbras.

La incomodidad que sintió en el pliegue interior de su codo lo tuvo llevando su mano hasta éste y sólo cuando se encontró con una intravenosa fue que recordó todo. Y entonces aquel pitido molesto aumento de velocidad.

— ¡Papá! — escucho a TaeHyung a su izquierda y antes de que pudiera voltear, la luz fue encendida y él se llevó la mano a la cara para proteger sus ojos, pero al hacer dicho movimiento un terrible dolor en su hombro lo tuvo quejándose.

De pronto TaeHyung estaba prácticamente sobre él, viéndose asustado y preocupado.

— ¿Cómo te sientes? — le dijo pasando una mano por su cabello.

Pero JiMin no estaba preocupado en lo más mínimo por sí mismo.

— ¿El bebé?— pregunto expectante y atemorizado a la vez.

TaeHyung le sonrió afectuosamente. — Está bien, papá, el doctor hizo un eco y todo se veía normal, dijo que no era probable que hubiesen secuelas, porque fueron solamente pocos los segundos en los que no tuvo oxígeno, pero que aun así tienes que evitar emociones y esfuerzos fuertes durante lo que resta del embarazo.

JiMin suspiro con alivio, llevándose una mano al vientre.

Después miro alrededor de la habitación, que era tan estéril como cualquier habitación de hospital.

— ¿Qué hora es? — dijo apenas dándose cuenta de lo ronca que tenía la voz.

Bueno, no puedes esperar algo bueno cuando alguien intentó ahorcarte pensó.

—Es la una de la mañana, estuviste inconsciente como seis horas, tal vez un poco más. — dijo TaeHyung encogiéndose de hombros.

JiMin vio cómo su hijo lo miraba durante largos segundo y entonces se estaba agachando para besar su frente y abrazarlo.

—No me vuelvas a hacer algo así otra vez, papá. Estaba muy asustado cuando Jungkook me hablo, creí que te iba a perder y no quiero perderte nunca.

—No me vas a perder, sólo fue una tontería. — no había sido una tontería, la habitación del hospital en donde estaba se lo recordaba, pero el punto era no preocupar a TaeHyung y entonces ahí se valía restarle importancia a todo.

Beso la mejilla de su hijo, que se apartó con ceño levemente fruncido.

—No fue una tontería, papá, pudiste haber muerto, de no ser por los guardias seguramente estarías muerto. — y de pronto TaeHyung se veía furioso, y no con JiMin, sino que estaba recordando al imbécil que le había hecho eso a su padre, de no ser por Jungkook, TaeHyung habría ido a matarlo.

JiMin tomo una mano de TaeHyung y le dio un apretón, sonriéndole.

—Pero estoy bien, estamos bien. — rectificó con su otra mano aún sobre su vientre.

—Sí, me alegra que el bicho también esté bien. — dijo el alfa sonriendo.

JiMin no pudo evitar rodar los ojos.

—No le digas bicho a tu hermano o hermana. — regaño, viendo a TaeHyung rodar los ojos y sólo fue ahí que cayó en la cuenta. — ¿Y Jungkook?

TaeHyung respingo y prácticamente salto un paso lejos de la camilla.

—Ah, no sé, creo que fue a... la... cafetería, y... yo, ah, voy a buscarlo, sí. — se dio media vuelta, listo para salir de la habitación.