Capítulo 12: Grandes esperanzas en cuerdas de terciopelo

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"¡A su derecha!"

Ali miró brevemente sobre su hombro antes de comenzar a disparar en la dirección general de los monstruos. Algunos rayos golpearon a los monstruos de frente, y otros estaban muy lejos. Ella suspiró molesta pero no dejó que la afectara. Después de todo, volaba aproximadamente a treinta millas por hora por el centro de Magix, y tenía que asegurarse de no golpear a Alec, que la seguía en una motocicleta que él ... había tomado prestada.

La mayoría de los civiles habían huido tan pronto como las criaturas comenzaron a aparecer, pero había visto a algunos que no tuvieron tanta suerte. Se le retorció un nudo en el estómago y rezó para que el Ejército de la Decadencia solo estuviera en Magix. Si se hubieran ido a la Tierra, si hubieran encontrado a su familia ... casi podía imaginarse a su hermano pequeño asustado mientras atravesaban las ventanas de la sala de juegos, la mirada atónita en el rostro de Melissa cuando entraron en ella dormitorio en la universidad, listo para la huelga. ¿Qué pensarían sus padres si supieran que su propia hija fue responsable de la muerte de tantas vidas en todo el universo?

"¡Alison!"

Ella se sacudió de sus recuerdos por la sensación de que algo pesado se enganchó en su pierna. Su piel comenzó a arrugarse mientras giraba su cabello para mirar lo que fuera, sus peores temores se confirmaron cuando vio un Monstruo de las Sombras. Le disparó una ráfaga, pero la energía oscura pareció hacerlo crecer aún más.

"¡Quítate de encima, pequeño asqueroso!"

En respuesta, emitió un chasquido y casi pareció sonreír cuando la cara de la criatura se derritió, dejando lo que parecía una mancha marrón oscura en su pierna.

Alec bajó la velocidad de su bicicleta, y Ali voló para que ella estuviera a su lado. "¡Necesitamos un plan!" ella gritó sobre el fuerte viento que parecía venir con los monstruos.

"Hay una rama de catacumbas viejas corriendo por debajo de la ciudad. Si recuerdo correctamente, hay una desde la base oculta de la Fuente Roja hasta el palacio de justicia. Suponiendo que Icy no lo sepa, podríamos usarla para entrar allí".

Ali asintió con la cabeza. "Me gusta. Entonces, ¿a dónde vamos desde aquí?"

Se detuvo en seco cuando un dolor punzante le atravesó la pierna. Se sentía como si alguien estuviera vertiendo ácido sobre ella, la carne se derritía lentamente. Sus alas dejaron de funcionar y se estrelló contra el suelo, patinando sobre el concreto. La niña apenas logró levantar la cabeza y mirar hacia abajo a su pierna. La masa oscura de lo que ella pensaba que era un monstruo Sombra muerto burbujeaba, un sonido chisporroteante provenía de ella. Después de un momento, el sonido aumentó y el dolor de repente fue mucho más intenso.

Gritó, la sensación mareada de magia drenándose de su sistema se apoderó de ella como una ola. Su forma de hada parpadeó antes de disiparse, dejando que la criatura comenzara a comer a través de su ropa.

"¡Quédate quieto!" antes de que ella pudiera protestar, Alec tenía una espada blanca brillante en su mano y sostenía su pierna quieta. Rápidamente y con precisión corrió la hoja paralela a su pierna, cortando a la criatura. Se escuchó un grito inhumano y se desvaneció en polvo.

Ali tomó algunas respiraciones desiguales, demasiado temeroso para mirar su pierna. "¿Qué ... qué fue eso?"

"Una Espada Fantasma hecha de la luz de Solaria y bendecida por Arcadia. Es venenosa para ellos".

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