*Rewrite the stars* (Terminada)

Planes

Kendall camino desconcertada, confundida, paso de largo la estación de autobús, sin mirar atrás, al llegar a casa, tenía un rostro pálido, para su suerte, Linnie le dejo una nota donde le avisaba que llegaría en la noche, por qué tenía cosas que comprar, subió a su baño, lavo su cara, se puso una pijama con pantalón rosa de flores y una camiseta que llevaba una flor grande, aprovechando el hecho de que todas sus tareas ya estaban adelantadas, apagó la luz a pesar de ser apenas las 6 de la tarde, cerró los ojos, llorando desconsolada, grito, mordió su almohada, sentía impotencia, enojo, quería volver el tiempo para darle un golpe a Reynaldo, o al menos haberle pedido ayuda a Kick, lloró hasta que sus ojos le exigían quedarse cerrados, así lo hizo, poco a poco se fue sintiendo cansada, hasta que sucumbió al sueño.

En su mente estaba su naciente amistad con el acróbata, no pudo evitar recordar su sonrisa seductora, sus ojos color del mar, esa voz profunda que hacía que se perdiera en un limbo pacífico, mientras dormía, sonreía, verlo en su mente le daba calma, le hacía sentir bien; llegó la mañana, Kendall despertó sin miedo, tubo un sueño reparador y le ayudo a reflexionar, se puso unos jeans, unos zapatos azul cielo de plataforma , y una blusa de manga 3 cuartos del mismo tono de sus zapatos, le sobraban unos minutos antes de irse a la escuela, optó por escribir en su diario, lo busco por todos lados.

-*Lo dejé en la biblioteca, eso significa que posiblemente Reynaldo lo tenga,¡ Dios mío!... ¿Cómo pude ser tan tonta?*

Al poco rato, Linnie la llamó para desayunar, por primera vez, la mujer vió a su hermana menor apresurada, desayunaron deprisa, y velozmente subieron al auto para llegar a la escuela, mientras tanto el chico castaño, vestido con una camiseta azul y jeans negros , subía plácidamente a su motocicleta, arrancó , llegando prácticamente al mismo tiempo que las hermanas Perkins.

Kick vió descender del auto blanco a Kendall y a Linnie, se quitó su casco, paso su mano por su cabello con la intención de peinar lo un poco, dió un profundo respiro con la intención de acercarse a Kendall.

-*Nunca me arreglo el cabello para hablar con alguien, y menos con una chica, pero, piensa Kick, ella estaba asustada ayer, tal vez puedes ayudarla y...*

-¡Hola Kick!- mencionó una chica castaña con cabello rizado, vestida con una camiseta verde y jeans rotos, que se atravesó en el camino de Kick.

- Sharlene,no lo tomes a mal, pero tengo un poco de prisa- dijo el acróbata que trataba de mirar por atrás del hombro de la chica mientras intentaba rodearla.

- Tú siempre tienes prisa, nunca hablamos, ¿Por qué no te detienes un segundo y me muestras tus cicatrices recientes?- la chica le tomaba las manos al joven, tratando de acercarse lo más posible.

Para Kick, Sharlene era una Jackie a la quinta potencia, aunque no le siguiera a todos lados, era tan insistente y poco discreta que lo ponía con los nervios de punta.

- Mira, sería un placer atender a una de mis fans, pero ahora, tengo clase - Kick se soltó tan pronto como vió que ella se acercaba, al verla suelta corrió buscando a Kendall

- Llámame, te estaré esperando- Mencionó la joven mientras agitaba la mano y suspiraba.

Mientras Kick fue interrumpido por Sharlene, Kendall llegaba a su casillero, pegado al pasillo estaba el chico rubio de lentes, vestido con pantalones azules y una chamarra negra con líneas blancas horizontales que la esperaba de forma impaciente, él caminó hacia ella con sigilo.

-Hola, querida - mencionó Reynaldo en tono melancólico

- ¿Qué quieres? - Kendall respondió en tono indiferente al abrir su casillero, aunque por dentro le ardía la sangre del terror que sentía.