Todo comenzó en el reino humano, concretamente en su capital, Vesta. Todo iba como cualquier otro día, sin altercados en las calles...Como siempre los caballeros patrullaban las calles para evitar cualquier tipo de problema, y avisar de cualquier cosa o gente que resultase ser sospechoso, ese día lo único anómalo fue un grupo de encapuchados que se dirigían al castillo.
Los caballeros pararon al grupo de encapuchados para asegurarse de que no tuviesen malas intenciones, por suerte o por desgracia aquel grupo era un grupo de sacerdotes que se dirigían al castillo a darle un mensaje al rey.
El grupo de sacerdotes prosiguió su camino al castillo, al llegar a la puerta los caballeros preguntaron el motivo de su visita al castillo, a lo que contestaron:
- Traemos un mensaje de su potestad a su majestad.
Los caballeros abrieron las puertas del castillo y los escoltaron hasta la sala del trono, allí los recibió su majestad Walter III, tras entrar a la sala los sacerdotes le dijeron a su majestad:
- Debemos hablar de lo que usted ya sabe.
Tras escuchar eso su majestad ordenó a todos abandonar la sala menos a un caballero, el cual iba en útil o en una armadura plateado tan reluciente que parecía brillar por si sola, este caballero iba armado con una espada larga hecha con el mejor acero del reino.
- Majestad - dijeron los sacerdotes. - ¿este caballeros es de total confianza?-
- Sí, es mi mejor caballero y mano derecha. - contesto su majestad. - Bien pues vayamos al asunto que nos incumbe - continuó - ¿Que hacéis aquí y porque queréis hablar del sello?
- Su potestad nos a comunicado que los sellos se han debilitado y que hay riesgo de que estos sean abiertos de nuevo - contestaron los sacerdotes.
- Tonterías ese sello lleva 400 años y nunca en la historia de mis antepasados ha ocurrido algo así, ¡eso es imposible! - contesto su majestad.
- De ser así no habría ningún problema en que nos dejará revisar el sello, ¿verdad? - afirmaron los sacerdotes.
- Esta bien, pero os acompañará Ben. - observo y se dirigió esta vez al caballero.- Ben asegúrate de que no haya nada extraño.
- No se preocupe majestad no ocurrirá nada bajo mi supervisor.- aseguro el caballero.
El rey se levantó de su trono y se dirigió a la derecha de la sala, donde se encontraba una palanca, el rey la accionó y el trono se desplazó hacia atrás dejando al descubierto unas escaleras que bajaban a una cámara secreta. El caballero guió a los sacerdotes por las escaleras y llegar a la cámara, la cual estaba completamente a oscuras. Tras un rato caminando en la oscuridad llegaron a unas enormes puertas con unos símbolos extraños en ellas.
Los sacerdotes preguntaron al caballero:
- ¿A dónde nos ha llevado?
- Tras estas puertas se encuentra el sello que mantiene la oscuridad sellada, pero solo aquellos que sean dignos podrán abrir las puertas, o eso dicen los símbolos que pusieron los sabios hace 400 años. - informo con voz firme el caballero.
- No hace falta ser digno caballero, solo hace falta la fuerza necesaria para romper las puertas y poder entrar.- dijo uno de los sacerdotes.
El caballero se dio la vuelta y desenvainó su espada, al darse la vuelta los sacerdotes tenían varias armas equipas. El caballero pudo distinguir: Un báculo, una espada, un arco, y el último de ellos había desaparecido.
Sorprendido el caballero inquirió:
-¿Quiénes sois? ¿Qué queréis?
El que parecía el líder, el cual tenía una marca en la cara que le iba desde la frente hasta la mejilla pasando por un ojo blanquecino, dijo:
- Somos el círculo y venimos a liberar a nuestro Dios, y lo único que se interpone eres tú.
Así pues inicio una batalla entre el líder del círculo y el caballero, ambos eran unos espadachines muy diestros, ninguno dejaba una apertura clara para dar el golpe decisivo, fue aquí cuando los otros intervinieron en la batalla, el arquero empezó a disparar flechas continuas hacia nuestro valiente caballero el cual las detenía con la espada y esquivaba según podía. El miembro con el báculo demostró ser un brujo que sabía magia de fuego y rayo, lanzaba orbes de ambos tipos consecutivos los cuales sólo podía esquivar el caballero.
Todo esta perdido eran demasiado fuertes para el caballero, desde la nada apareció un martillo gigante el cual golpeó al caballero con tal fuerza que lo lanzó volando contra las puertas del sello, las cuales saltaron en mil pedazos junto con la armadura del caballero, el cual quedo en el limbo entre la vida y la muerte.
El círculo entro en la sala y vio en el centro un círculo mágico morado, que parecía estar apunto de desmoronarse ya que, se veían fluctuaciones como si algo quisiera salir de él, el miembro con el báculo empezó a repetir una serie de palabras en un idioma desconocido y poco a poco el sello se desvaneció. De el apareció una especie de masa humeante negra que salió disparada al exterior y en la sala se deslumbro algo con forma humana, todos los miembros del círculo se inclinaron y dijeron bienvenido señor King.
King tenía un aura oscura que lo envolvía, era un hombre alto y musculoso de pelo negro con una mirada de odio hacia la vida misma.
- Gracias, es hora de irnos. - dijo King.
Todos se acercaron a él y desaparecieron con un aura negra, lo único que quedo en la sala fue Ben, el cual parecía haberle llegado la hora.
Fuera en el reino humano comenzaron a ocurrir desastres naturales como por arte de magia: la oscuridad comenzó a apoderarse de las mentes humanas, atrapando sus almas y incitando a cometer actos bandálicos, peleas entre ciudadanos y desastres naturales sin explicación ninguna.
Todo el reino humano parecía estar envuelto en una noche eterna.
¿Quién es King ? ¿Por qué el círculo lo ha liberado?
ESTÁS LEYENDO
Ragnarok
AventuraLa oscuridad fue sellada hace mucho tiempo y desde entonces el mundo a prosperado en paz, pero tras tanto tiempo los sellos se han debilitado y un grupo que venera a la oscuridad planea romperlos, solo un grupo de valientes guerreros podrá detenerlo...