Best Mistake (Secuela de BT) [EDITANDO]

Capítulo 8

Abby's POV.

El monto de papeles en la barra de la cocina me hacía querer salir y tomar un poco de aire.Podía sentir mi cabeza punzar mientras bebía un gran sorbo de líquido caliente cargado en cafeína.
Cara me observa del otro lado,colocando su bolso sobre el hombro y haciendo una mueca.

— Descansa cinco minutos,Abby.Luces jodidamente mal.-Su mueca de disgusto me hace mirarle mal y ríe levemente.Ella era realmente preciosa,Trevor debía enamorarse de ella,no de mí.

— Tu padre requiere esto en unos días,no puedo tomar un descanso.-Suelto el aire en mis pulmones y pone los ojos en blanco.
Sus mejillas forman unos pequeños hoyuelos al momento en que pasa una barra de labial sobre sus labios rellenos.- ¿Saldrás?

— No.Lamentablemente.-Suspira cansada y sé que su nuevo trabajo le mantiene tan ocupada que estaba gastando completamente sus energías.- Tengo una reunión y una cena más tarde.Espera por mí despierta y con mucho alcohol,Abby.

Sonrío con diversión y se despide arrojando un beso al aire.Sus tacones resuenan mientras sale y aún puedo escucharla en el pasillo.Sin lograr concentrarme hasta que el sonido desaparece.

Maldigo por lo bajo y continúo analizando las letras en un perfecto manuscrito.Sin embargo no evitaba sentirme ansiosa y mareada.Casi sin poder comprender lo que leía.
Y quería ayudar al sentimiento de vahído,dejando completamente mi trabajo y tomando del refrigerador la pasta sobrante de la noche anterior.
Sintiendo un ligero vuelco en el estómago.
Todo había marchado mal.Todo se sentía malditamente incorrecto.Y sólo recordar la vaga y vacía conversación que sostuve con Trevor me hace suspirar cansada.Porque no deseaba que se quedara,no deseaba conversar con él por horas de algo que me parecía sumamente aburrido.Incluso sí suena egoísta.Pero debía hacerlo,debía buscar estabilidad y algo de normalidad.

El vapor de la pasta al retirarla del microondas,crea un olor tan satisfactorio que me hace sonreír.Me parecía imposible no recordar al hombre alto y castaño prepararla para mí.Y el primer bocado se deshace en mi boca,erizando mi piel de satisfacción.

— Joder.-Mascullo cuándo el timbre resuena por todo el lugar y mastico con rapidez,limpiando los restos de mis labios con la lengua y me apresuro tanto a abrir la puerta que mi brazo golpea duramente el umbral de la cocina,maldiciendo en voz alta.
El timbre resuena de nuevo de manera desesperante y ahogo un gruñido en la garganta.

— Joder,Trev...-Suelto abriendo el gran trozo de madera y las palabras se atascan.
Harry se encontraba de pie frente a mí y apenas abro la boca para hablar cuándo sus largas piernas se anticipan a adentrarse.
Cierro la puerta detrás de mí y le observo; lucía indignado y serio.Con pequeñas arrugas surcando su entrecejo.Luciendo más cómo el Harry que dejé aquí.Con jeans desgastados,una camisa blanca que me permitía ver las líneas de los tatuajes en su torso y una chaqueta cubriendo sus hombros amplios.Oh,Harry.

— ¿Por qué regresaste? -Suelta y me observa fijamente.Como si pudiera ver a través de mí.Con sus ojos luciendo color avellana y analizando mi cuerpo,produciéndome un escalofrío en toda mi espina dorsal.

— No entiendo tu pregunta.-Confieso y me acerco unos pasos.
Lucía tan ajeno sin saber siquiera que yo aún le pertenezco.

Sus manos grandes toman el ramo de rosas que adornaban la estancia sobre un bonito jarrón color blanco y observo las gotas recorriendo los tallos de estas.Golpeando el suelo una tras otra y  noto los anillos de Harry.Los malditos anillos que ansiaba sentir sobre mi piel.

— Estabas feliz en Nueva York,Abby.-No paso de largo como alza ligeramente la voz y se da media vuelta,caminando por el lugar cómo sí de su hogar se tratase,entrando a la cocina.
Y le sigo,sigo sus largos y decididos pasos que se detienen en el contenedor de basura dónde sin ningún atisbo de modestia o compasión,desecha el ramo con tal desprecio que una parte de mí quiere gritarle en el rostro que no ha tenido tal derecho.Pero la otra parte estaba completamente enterada de la expresión de enfado que lleva.Y decido callar.