Capítulo I

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La gran ciudad.

Todos son charlatanes, siempre voy a pensarlo así. El caso de exorcismo que salió en todos los periódicos era falso, completamente. Me había dado cuenta cuando la supuesta afectada escondía una grabadora debajo de la almohada para imitar voces guturales.

—Patético. —Murmuro teniendo en cuenta que mi compañero no me escuche. Garfield era un "ayudante" se unió a mí porque pensaba que los demonios existían. Vaya timo. Después de convencerlo de que todos y cada uno de los exorcismos eran falsos me siguió.

—Oye, que estafa. Nos pagaron sólo la mitad, no, espera... ¿Cuánto nos pagarían?

Le arrebate el dinero, los números no eran su fuerte. Cuento el dinero lentamente. Noto que nos pagaron el doble, quizá para no decir nada de que era falso.

Asentí por la ventana del auto para que la mujer se quedará tranquila. No diría nada, el gobierno le daría una nueva casa gracias a todo ese teatro.

Comienzó a conducir. Gar miraba por la ventana distraído.

—Oh hermano, esperaba que está vez fuera real.

—Resignate Gar, los verdaderos demonios son las personas —bebí a tragos largos un café que gracias al clima aún se mantenía caliente.

Lo miro de reojo, su cabello verde ondea gracias a la brisa, me sonríe girando los ojos, sé lo que me dice mentalmente "Ya lo sé, señor escéptico". Vuelvo a mirar el camino, entonces un sonido interrumpe. Es el teléfono del trabajo.

Gar contestó.

—Liga de exorcistas Al'gul ¿Cuál es el problema?

El legado Al'gul y todos sus allegados era de exorcistas expertos. Para mi mala suerte era hijo de la jefa del clan.

Cuando llamaban a la Liga normalmente mandaban a uno de los tantos seguidores. Al menos hasta que el caso se veía serio o real.

—Iremos ¿Dónde?

Gar tensó su cuerpo, tragó saliva.

—Esta bien.

La llamada terminó y yo me giré para verlo.

—¿A dónde vamos esta vez?

—A Gotham.

No pude evitar levantar una comisura en una sonrisa tétrica.

—Vayamos entonces.

Giré el auto de manera brusca y partimos a Gotham, la gran ciudad. La ciudad del delito y de la mentira. Seguro será divertido.

—Comienza explicando el caso ¿Ya te llegó el expediente?

Gar asintió. Abrió el portátil y justo pudo leer en voz alta.

—Se llama Jonathan Samuel Kent Lane, dice que desde hace tres meses tiene episodios de histeria, habla solo, se autolesiona. Oh viejo, golpeó a su padre.

Asentí.

—Quizá sólo sea esquizofrenia, o ansiedad con agresividad.

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⏰ Última actualización: Aug 30, 2019 ⏰

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