《《B L I N D》》

ｃａｐ . 2.•*¨*•.¸¸♪

*Elizabeth pov*
                                

-¡Hola! Un gusto en conocerlos, ¡soy Elizabeth! Espero que nos llevemos bien.

Ah~ si tan solo pudiera ver sus reacciones y sus caras... lo único que puedo hacer es escuchar y tener tacto y olfato para darme cuenta de las cosas a mi alrededor.

Solo veo un vacio negro. Ni colores. Ni formas. Nada. No puedo ver.

Soy ciega...

-Elizabeth, ve a sentarte en el banco de allá atrás - me quede quieta ¿!cómo se supone que yo sepa donde queda eso!? - quinta silla de la tercer fila, a la derecha - lo escuche susurrar, gracias a dios, ¡casi me da algo!

Empece a caminar hacia alla, no quería preocupar a nadie...

Rozaba las mesas con mis manos para llevar la cuenta de cuantas iba pasando, al llegar a la quinta, me sente y deje la mochila donde había una especie de gancho.

Me quede quieta, todavía escuchaba muchos murmullos y no necesitaba ver para que sintiera varias miradas sobre mi persona.

                                          *Meliodas pov*

La chica nueva se había sentado al lado mio, ya que el traidor de Ban se sentó con su querida novia. Aún que no tengo problema, Elaine me cae bastante bien en realidad...

A lo que iba; Elizabeth no me notó desde que se sentó a mi lado, asi que decidí dar el primer paso.

-¡Hola, Elizabeth! Soy Meliodas, tu compañero de banco hasta que las clases terminen nishishi - dije alegremente y ella se volteó a mi dirección

-¡Oh! Espero que no llevemos bien en ese entonces - comentó mientras sacaba una cajita parecida a un mp3 pero sin cable - oye, ¿me podrias decir qué clase nos toca ahora? - decía mientras apretaba unos botoncitos

- Claro, ahora tenemos historia, aburrido ¿no crees? - no le presté atencion al mini dispositivo

-No tanto... la verdad, a veces me gusta saber lo que paso en el pasado... -dijo con una pequeña sonrisa que yo se la devolví.

Empezaron las clases y yo no pude evitar verla un par de veces ¿por qué no dejará ver sus ojos? O ¿por qué se transfirió aquí? Esas preguntas se repetían en mi cabeza creando distintas hipótesis hasta que sonó el timbre para el almuerzo.

Empezó a guardar sus cosas, asi que aproveche a preguntarle.

-Oye... ¿no quieres comer conmigo hoy? Despues te podre enseñar a mis amigos... Eso lo digo porque la mayoria se fue con sus parejas nishishi - me rasque la nuca mientras reía, en serio quería conocerla a fondo, talvez nos llevemos mejor.

-¡Claro! Pero... ¿me pondrías llevar? me costó mucho llegar aqui, este lugar es muy grande... - dijo. Se notaba apenada y no dude en contestarle.

-¡Bien, vamos! - dije llendo a la puerta de prisa.

-¡ESPERA! - se alarmó. La mire dudoso - ¿P-podrias darme tu mano en el proceso? Es que suelo perderme facilmente. Y por favor, n-no pienses que es por llamar la atención  ni nada, solo que enserio soy muy torpe... - bajó su cabeza en el proceso.

La mire con una sincera sonrisa, creo que si nos vamos a llevar muy bien...

-No hay problema... - la tome de la mano tiernamente, es muy suave... la vi con un lijero sonrojo en sus mejillas, creo que estamos igual. Despues nos dirijimos a la puerta - ahora si, vamos...

Y de allí nos fuimos a la cafetería, era un espacio muy grande con varias mesas y sillas al rededor y más atras estaba el lugar para pedir los almuerzos. Yo ya tenía el mio, por lo que le pregunte si quería ir a pedir el suyo y me dijo que tenía un paquete con desyuno/almuerzo dentro, asi que decidí llevarla a un lugar donde a mis amigos y a mi nos gustaba ir.

Era un mini bosque que había en el fondo del instituto, un poco alejado de la cafetería. Casi nadie iba allí y los chicos y yo siempre traíamos un par de cosas como almohadones o mantas para una especie de picnic o cosas asi para sentirnos a gusto.

Saque una manta escondida con dos pequeños almohadones para estar comodos y le pedí que se sentara. Me tire a un costado y empezamos a comer y charlar de cosas triviales, sacamos un par de risas, la disfrute mucho y creo que ella igual.

Sonó el timbre a lo lejos...

¡Mierda!

yo quería quedarme un rato más asi, estaba muy tranquilo... Raro de mi parte.

Elizabeth se levanto con el paquete ya vasio y me ayudo a levantarme, agarró mi mano y nos fuimos al aula de vuelta.

No lo voy a negar, ella es amable, gentil, graciosa, un poco timida, pero de confianza... Nos vamos conociendo de a poco y creo que tiene un par de secretos que no los deja salir a la luz. Pero siento que si seguimos a este paso, ella...

Ella va a ser muy especial en el futuro...