Sam Winchester no podía contar con una mano los momentos en los que se sintió incomodo o enojado por las ocurrencias de Dean, ni los sucesos que lo llevaron a ver al mayor no solo como su hermano y mejor amigo sino como su padre y héroe una verdad que hasta hace poco pudo confesar.
Dean le había dedicado su vida a su hermano menor eso nadie podía negarlo, desde los 4 años dejo de ser un niño para brindarle a Sammy la máxima protección a su alcance y Sam lo admiro como a nadie, deseando ser como el, siguiendo sus pasos para poder decir orgullosamente que era su hermano.
Pero ahora Sam podia contar con los dedos de una mano los sucesos que habían ocurrido tras la muerte de Cas:
1 el trato de Dean hacia Jack
2 la gran depresión de Dean
3 Dean sin fe
Y esto lo aterra porque su héroe nunca ha sido asi en el pasado, siempre lo vio luchando y saliendo adelante con una sonrisa en el rostro y perder al angel quizás era perder más que la fe.
Justo ahora dentro del bunker y revisando un caso al cual prefería ir solo con su hermano para tratar de distraerlo aun podia escucharlo pidiéndole que tuviera fe por los dos porque ahora no la tenía en nada, si era honesto consigo mismo estaba aterrado, su hermano siempre tubo fe en lo que hacía, o el futuro porque él se encargaba de que todo saliera adelante eso era lo suyo y si algo lo derrumbaba salía adelante por la familia y por Castiel.
En el pasado Sam decidió callar ante una mirada llena de un gran sentimiento, no era que decidiera hacerse de la vista gorda e hiciera como si lo que veía no fuese real, era sencillamente que prefería respetar el silencio de su hermano, ya que si este no le admitía los sentimientos que guardaba para el angel entonces el optaría por callar y ver en silencio como cada día Dean se enamoraba más de Cas, con el tiempo pudo ver como el amor que ambos callaban era reciproco, aunque aún no sabía si ellos ya se habían confesado o había ocurrido algo más íntimo entre ellos y sinceramente prefería no enterarse de eso ultimo ya que ver a su hermano teniendo sexo no era algo que su salud mental pudiese soportar, el sentimiento podía compararlo con los hijos que se trauman al ver a sus padres en pleno acto y en definitiva el elegía quedarse ciego a tener tal infortunio, pero si estaba seguro de una cosa, disfrutaba ver a su hermano feliz junto al angel aunque en ocasiones le tocase quedar en medio de sus discusiones, aun sentía la piel erizándosele de miedo cuando recordaba que su hermano puede llegar a celar en demasía al celestial.
Temía que ahora está perdida llegara a niveles desenfrenados puesto que si hay algo que Dean daba por hecho es que Castiel siempre estaría a su lado, pero nadie pudo adivinar que esto un día dejaría de ser así y todo por Lucifer y toda esta situación no paraba de dar vueltas en la cabeza del cazador.
-El guerrero rojo, El señor de las bestias, El señor de las bestias II...te gustan mucho las de fantasía verdad Sam- aquella observación por parte del menor lo había hecho despegar la mirada de la Tablet
-si y por ello cuídalas, revise la despensa en la mañana hay de todo cualquier cosa llámame y Jack...diviértete pero no te excedas con el dulce no es bueno para la salud
El chico había asentido con la cabeza mientras sus labios trazaban una suave sonrisa que solo detonaba la inocencia que en el existe y al verlo a los ojos Sam sabia una cosa, por todo lo que una vez hizo su hermano por él, este niño tendría la misma protección y cariño aunque aún no supiera como ayudar a su propio hermano.
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Recuerdos
RandomAmbientado en la S13 de Supernatural, tras la muerte del ángel rebelde Castiel a manos de su hermano mayor el arcángel caídoD Lucifer, Dean entra en una severa depresión llegando al punto de recluirse en si mismo y mal dirigiendo su ira a un inocent...