El caso del cerro panteón trata de dos amigos, Pablo y Felipe, quienes desean disfrutar de unas apacibles vacaciones en Valparaíso, alejándose de cualquier preocupación y casos misteriosos de su pasado. No obstante durante su estadía en el acogedor Hotel Barlovento un asesinato se cruzaría en su camino, frustrando todo intento de encontrar la paz.
Personalmente no fui capaz de encariñarme con ningún personaje, siendo todos estos unidimensionales, una caricatura de la persona que pretenden ser; probablemente el problema es que exageraron una característica de cada personaje llegando a caer en lo irreal, otra errata que recae en la construcción de estos es que no parecieran poseer sentimiento alguno, llegando a ser robots que solo están ahí para cumplir con la trama.
A la hora de redactar una historia los personajes deben poder escribirse a sí mismos con sus acciones y palabras, antes de que estos salgan a la luz el autor debe conocerlos tanto como se conoce él mismo o de ser posible mejor. Deberían poseer sus propios complejos, miedos, debilidades, sueños, fortalezas y EMOCIONES. Se supone que para que un personaje quede gravado en la memoria del lector debería ser alguien que perfectamente podrías encontrarte en la vida real, o tal vez, seres abominables que ames odiar, tan reales como tú o como yo: Ser capaces de salir de las páginas. Expectativas que el caso del cerro Panteón no alcanza.
El libro posee una premisa que pudo ser mejor utilizada, a pesar de lo vista que sea, tal vez el libro pudo salvarse un poco si al menos jugara con los sospechosos. El libro pretende dar un plot twist sin obtener resultados muy favorables, para que esto funcione primero tienen que meternos en el caso o de lo contrario será algo poco relevante para el lector, además de que debería ser creíble, el giro argumental que da es algo carente de sentido.
Otro punto que personalmente a mí me incomodó en la narración fue el énfasis que pusieron en los términos «Modernos», buscando de esta forma que las nuevas generaciones se metan más en la historia, siendo esto demasiado forzado.
Tengo claro que no debería esperar demasiado de este libro, pues es para niños. ¿Pero acaso los niños no merecen literatura de calidad?, otro conflicto que tengo con este libro es el hecho de que sea una lectura obligatoria en mi escuela; no entrega un gran mensaje, no es interesante, no sería capaz de enseñarle a alguien a amar la literatura, en todo caso generaría aversión hacia la misma y siento que me obligaron a leer este escrito por el único motivo de que transcurre en mi país (Chile).
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Destripando libros
Non-FictionUna asesina serial de libros ha sido absuelta de una gran biblioteca; Se caracteriza por destripar el libro que se le cruce enfrente, desmembrar palabra por palabra, analizar hasta el más mínimo detalle. Suele apuñalar con cada aspecto negativo del...